Se conectan casi siempre por el teléfono móvil, sin que sus padres lo sepan, incitados por amigos que ya lo hicieron Estos niños pasan aproximadamente una hora y media diaria en la plataforma, revelando un acceso prematuro y significativo a las redes sociales desde edades muy tempranas.
Además, el informe destaca que el 65% de los adolescentes españoles de 13 a 15 años utiliza Instagram, situando a España como el país donde los jóvenes comienzan a utilizar esta red social antes que en otros países. Esta tendencia subraya la creciente integración de las redes sociales en la vida cotidiana de los jóvenes españoles, influida por factores como la conectividad digital.
El uso precoz de las redes sociales entre los jóvenes no está exento de riesgos. Expertos de Qustodio advierten sobre posibles efectos negativos como el ciberacoso, la dependencia digital y la constante comparación con otros usuarios, lo que puede afectar negativamente la salud mental y emocional de los jóvenes en periodos críticos de desarrollo y maduración.
Emily Lawrenson, Communications Manager de Qustodio, enfatizaba en una entrevista a Radio Menorca que la importancia de una educación digital temprana y del monitoreo activo por parte de los padres para mitigar estos riesgos. “Es crucial que las familias sean conscientes de los efectos potenciales que las redes sociales pueden tener en sus hijos desde una edad temprana. Estamos viendo cómo los niños acceden cada vez más pronto a plataformas que pueden exponerlos a riesgos significativos mientras aún están en proceso de desarrollo”.
En respuesta a estas preocupaciones, el Gobierno español está considerando medidas para proteger a los menores de contenido inapropiado en internet, reflejando la creciente sensibilidad hacia la seguridad digital de los niños en la sociedad actual.
Qustodio, fundada en Barcelona y operando globalmente desde 2012, se dedica a proporcionar herramientas para la seguridad y el bienestar digital de las familias. Con más de 6 millones de usuarios en más de 180 países, la plataforma busca promover un uso saludable de la tecnología y facilitar una comunicación abierta sobre los riesgos asociados con el uso de las redes sociales desde una edad temprana.
Así, mientras las redes sociales ofrecen oportunidades para la conectividad y el aprendizaje, es fundamental que los padres, el gobierno y las empresas tecnológicas colaboren en la educación y protección de los jóvenes para un uso seguro y responsable de las plataformas digitales.