La fundación por la conservación del mar Marilles ha denunciado que pescadores lancen atunes que mueren en el proceso de captura y transporte al mar de Balears, una práctica nociva para el medioambiente que además puede ser perjudicial para otros profesionales de la pesca.
La entidad ha anunciado en un comunicado que este martes “una barca ha capturado accidentalmente 13 atunes muertos y en estado de descomposición” entre la bahía de Palma y Andratx, en Mallorca.
Marilles hipotetiza que “los barcos pesqueros lanzan al mar los atunes muertos para que no computen en su cuota de pesca” y alerta de que “estas malas prácticas tienen un gran impacto ambiental, económico y social”.
La fundación denuncia que este hecho afecta a la flota pesquera de las Illes Balears porque “pescar atunes en descomposición pone en riesgo las herramientas de pesca” y “lo que se pesca junto al ejemplar afectado no se puede comercializar”.
Marilles pide “una investigación para identificar a los pescadores y empresas susceptibles de esta actividad ilegal” y que se inhabiliten “las embarcaciones sospechosas hasta que se tomen medidas para que estas malas prácticas no se repitan”.