Un hallazgo fortuito por parte de unos excursionistas en Cala Pudent llevó a la Guardia Civil a desactivar un proyectil de artillería. La semana pasada, mientras caminaban por la zona, los excursionistas descubrieron lo que parecía ser un artefacto de artillería y alertaron rápidamente a las autoridades.
El GEDEX (Grupo Especialista en Desactivación de Explosivos) de Maó fue activado tras la notificación. Al verificar las coordenadas proporcionadas, los especialistas comprobaron que el proyectil se encontraba en una zona de difícil acceso. Para llegar al lugar, se contó con el apoyo del Servicio Aéreo de la Guardia Civil y un especialista del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña.
Tras analizar el artefacto, se confirmó que se trataba de un proyectil de artillería de 88 mm, datado de hace unos 30 o 35 años. Se presume que el proyectil, lanzado durante alguna maniobra militar, no explotó y se encontraba en un estado de conservación que implicaba un gran peligro de activación.
Los especialistas TEDAX de la Guardia Civil procedieron a desactivar el proyectil, detonándolo de forma controlada según el protocolo establecido.