Las fuertes lluvias del fin de semana del 21 y 22 de septiembre provocaron desprendimientos de rocas de pequeñas y medianas dimensiones en la carretera Me-9, que conecta la carretera Me-7 con Addaia, Arenal d’en Castell, Coves Noves y na Macaret, entre otros puntos. Esta zona presenta un alto riesgo de deslizamientos debido a taludes inestables y de fuerte pendiente.
Aunque hay señalización permanente advirtiendo del peligro de desprendimientos y se añadieron conos provisionales en las áreas afectadas, el conseller de Més per Menorca, Esteve Barceló, ha manifestado que “pasan los días y aún no se han retirado las piedras ni la señalización provisional”, lo cual invade un arcén ya de por sí reducido y peligroso, especialmente para ciclistas y motoristas.
Barceló ha presentado formalmente una solicitud al Consell Insular para que se agilice la retirada de las rocas y se acondicione la vía, además de pedir una planificación de soluciones adaptadas para todos los taludes que representan un peligro para la circulación y la seguridad en Menorca.
É que algú esperava prontitud, eficàcia i rapidesa en preveure i sol-lucionar ses coses que pertanyen a n’aquesta devaluada i inoperant administració pública ? Per lúnic que són ràpids i eficaços és a s’hora de pujar-se es sou i ses dietes. Quin personal