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Escritores de Menorca ante la disyuntiva de cómo tributar por la venta de sus libros

La fiscalidad está definida pero no establece diferencias entre un escritor consagrado y quien lanza unos pocos ejemplares de su primer libro

¿Me vale la pena darme de alta de autónomo por escribir?
¿Me vale la pena darme de alta de autónomo por escribir?
Foto: Pixabay

Si tienes el objetivo de que tu actividad principal sea la de ganarte la vida vendiendo tus libros, aquí no hay mucho que discutir. Pero la mayor parte de escritores hoy, muchos de ellos en Menorca, publican unos pocos ejemplares, no para ganar dinero sino para recuperar la inversión de lo que cuesta imprimirlos. Que un libro se convierta en un éxito editorial no es algo que suceda de manera fácil, ni rápida ni casual. Hay inversión y mucho trabajo detrás. Y hoy en día, al ser tan fácil que te impriman tu escrito, ya no se depende de intermediarios, editoriales ni agentes. Por contra, los resultados suelen diferir de la venta masiva de ejemplares. Es decir, que no se convierte ni de lejos en una actividad de la que se pueda esperar obtener beneficios. Pero la fiscalidad del escritor no hace distinciones y crea grandes dudas entre los escritores amateurs. En Menorca hay varios jóvenes escritores que preparan un debate sobre el tema.

Si eres un escritor, tal vez te hagas preguntas del tipo:

– ¿He de darme de alta en Hacienda?
– ¿En qué epígrafe de IAE?
– ¿Qué obligaciones fiscales tengo?
– ¿He de darme de alta como autónomo para ejercer como escritor?

La mayoría de los escritores no se dan cuenta de que sus memorias, su colección de cuentos, su libro o su novela pueden aportar dinero en sus cuentas, aunque sea una pequeña cantidad. Y si tienes ingresos por tu obra, has de cumplir con ciertas obligaciones fiscales.

Los impuestos de los escritores

El primer escollo a superar es que gran parte de los escritores no conciben la idea de lucrarse de esta actividad. Sin embargo, si las entradas de dinero por ser escritor representan una actividad económica formal y habitual, se deben declarar.

Hacienda considera escritor a toda persona que reciba ingresos recurrentes por la venta de sus libros. Si se generan ingresos de manera habitual, aunque sean pequeños, hay que darse de alta en Hacienda y en la Seguridad Social como autónomo. En caso de cobrar menos del SMI, la habitualidad de los ingresos sigue siendo el criterio clave para determinar la obligación de darse de alta.

Alternativa: Cooperativas de facturación

Ante la exigencia de darse de alta como autónomo, algunos escritores han recurrido a las cooperativas de facturación. Estas plataformas permiten a sus asociados facturar trabajos sin estar inscritos en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos). Legalmente, se constituyen como cooperativas de trabajo asociado, pero en la práctica actúan como intermediarios que prestan servicios de facturación, liquidación de impuestos y asesoramiento legal.

Estas cooperativas están dirigidas a:
– Autónomos que facturan por debajo del SMI.
– Personas que hacen trabajos puntuales por cuenta propia.
– Trabajadores por cuenta ajena que desean facturar como freelancers.

En lugar de darse de alta como autónomo, el escritor se asocia a la cooperativa, paga una cuota anual y comunica con antelación los trabajos que va a facturar. La cooperativa lo da de alta en la Seguridad Social solo por los días en que trabaja y se encarga de liquidar los impuestos.

Sin embargo, este modelo no está exento de riesgos. Tras el desmantelamiento de Factoo por parte del Gobierno, la Inspección de Trabajo ha aumentado la vigilancia sobre estas cooperativas. Aunque algunos tribunales han fallado a favor de trabajadores que facturaban menos del SMI, la Seguridad Social sigue considerando que la habitualidad y no el importe de los ingresos es el criterio clave para la obligación de alta en el RETA.

Para evitar problemas, algunas cooperativas como Acento Cooperativa realizan estudios de viabilidad para determinar cuándo es conveniente que un escritor se convierta en autónomo formalmente.

Obligaciones fiscales de los escritores

Los impuestos que un escritor debe pagar dependen de si explota sus obras personalmente o vende sus derechos a una editorial. Si cede los derechos, los ingresos se consideran rentas del trabajo y se aplicará una retención del 15% en IRPF. Si vende sus libros directamente, debe darse de alta en el IAE y tributar como actividad económica.

En cuanto al IVA, si el autor vende directamente sus libros, debe aplicarse un IVA superreducido del 4%. En cambio, si los derechos los gestiona una editorial, el autor estará exento de IVA.

¿Tienes más dee 65 años?

Desde 2019, los escritores pueden compatibilizar su pensión con ingresos por sus libros sin perder derechos, algo que anteriormente generaba problemas con la Seguridad Social.

La fiscalidad para los escritores sigue siendo un tema de debate. Mientras algunos optan por el alta como autónomo, otros buscan alternativas como las cooperativas de facturación, aunque con ciertos riesgos legales. En Menorca, el debate sigue abierto y cada escritor debe evaluar cuál es la mejor opción según sus circunstancias personales.


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