El Institut d’Estudis Baleàrics (IEB) ha puesto en marcha “Encuentros de conversación”, una iniciativa destinada a fomentar el uso social del catalán mediante la creación de parejas lingüísticas. Esta campaña, que se extenderá durante el primer semestre del año en todas las Islas Baleares, busca conectar a personas catalanohablantes con aquellas que desean aprender el idioma, promoviendo así la integración y la práctica en entornos informales.
El programa establece un mínimo de diez encuentros entre cada pareja, permitiendo que los aprendices pierdan el miedo a expresarse en catalán y que los hablantes habituales refuercen su hábito de dirigirse en esta lengua a quienes desean aprenderla. Según el director del IEB, Llorenç Perelló, “el objetivo es crear un marco donde los no-catalanohablantes puedan practicar la lengua, adquirir seguridad y mejorar su expresión oral, al tiempo que se amplían los espacios de uso social del catalán”. Además, Perelló destaca que esta iniciativa contribuye a la cohesión social, al fomentar vínculos entre personas de distintos orígenes a través de la lengua y la cultura.
La asignación de parejas lingüísticas estará a cargo de la Red de Centros de Catalán, con sedes en Palma, Manacor, Inca, Eivissa y Ciutadella. Se tendrán en cuenta las preferencias de los participantes, como la disponibilidad horaria, el lugar de residencia y las aficiones, para garantizar una experiencia enriquecedora y adaptada a cada aprendiz y su guía de conversación.
Para facilitar el aprendizaje, el IEB ofrecerá seguimiento periódico y material de apoyo, incluyendo un cuaderno con actividades y temas de conversación. Además, en colaboración con la Obra Cultural Balear, se organizarán actividades culturales y salidas que permitirán a los participantes practicar la lengua en un contexto más dinámico y enriquecedor.
El programa se sustenta en la colaboración con entidades especializadas en acompañamiento lingüístico, como el Institut d’Estudis Eivissencs en la isla de Eivissa y la Obra Cultural Balear en Mallorca. Su enfoque práctico y flexible pretende incentivar a más personas a utilizar el catalán en su día a día, convirtiéndolo en una herramienta efectiva de integración social y cultural en Menorca y el resto de Baleares.