Este sábado, el Ateneo de Maó acoge la presentación de Historias alucinantes de Rusia, el nuevo libro del periodista Manel Alías. A las 19 horas, el corresponsal catalán compartirá con el público menorquín su experiencia vital y profesional en el país más extenso del planeta, donde ha residido durante más de siete años cubriendo la actualidad bajo el régimen de Vladímir Putin.
Alías no solo ha sido testigo directo de grandes acontecimientos políticos y sociales en Rusia, sino también un observador atento de las pequeñas historias que componen el alma de una nación compleja y contradictoria. “Rusia va a mejor y a peor, simultáneamente”, cita en la introducción del libro, recordando una frase escuchada en un bar de Moscú que, para él, resume a la perfección la esencia del país.
En Historias alucinantes de Rusia, Alías construye un relato poliédrico a partir de una sucesión de retratos humanos que desbordan emoción, dureza y belleza. Entre sus páginas se encuentran historias como la de una mujer que, siendo niña, presenció el aterrizaje de Yuri Gagarin mientras plantaba patatas con su abuela; la del DJ “radiactivo” que ofrecía música a quienes trabajaban limpiando los restos del desastre de Chernóbil; o la de la anciana que patina cada mañana sobre el hielo del lago Baikal. Son escenas que no cabían en las crónicas televisivas, pero que ayudan a comprender mejor el carácter ruso y su cotidianidad marcada por un clima extremo, una historia convulsa y una arraigada tradición.
“Mi objetivo no es sentar cátedra sobre Rusia”, afirma el autor, “sino compartir lo que he visto y vivido desde mi privilegiada posición como corresponsal, pero también como vecino, padre de familia y curioso constante”. A través de 62 capítulos que combinan grandes temas como la carrera espacial, la guerra o la política, con escenas más íntimas y cercanas, el libro se convierte en una invitación a descubrir un país de extremos: de guerra y poesía, de represión y arte, de miedo y ternura.
Tras ser vetado por las autoridades rusas por el enfoque crítico de sus reportajes, Manel Alías no descarta volver pronto a Ucrania, donde ha trabajado también como enviado especial y donde continúa la guerra que marca hoy buena parte de la política global. Mientras tanto, celebra poder presentar su obra en Menorca, una isla a la que guarda un especial cariño.
El acto de este sábado se perfila como una oportunidad única para conocer no solo los entresijos de la Rusia contemporánea, sino también la mirada de un periodista comprometido con contar el mundo desde dentro. Quienes asistan al Ateneo de Maó podrán compartir impresiones con el autor y descubrir esas “historias alucinantes” que solo alguien con su sensibilidad y experiencia podría haber recogido.
