Sant Josep, 5 may (EFE).- El presidente del Consell de Menorca, Adolfo Vilafranca, ha anunciado un acuerdo con el Govern balear que permitirá financiar las obras de la carretera general entre Maó y Alaior, cuyo coste se ha ampliado desde los 9,1 millones de euros previstos inicialmente a 21 millones.
En la rueda de prensa posterior a la Conferencia de Presidentes, celebrada este lunes en Ibiza, el presidente menorquín ha culpado del sobrecoste a la “inacción” del anterior gobierno insular, que “tuvo paralizados los trabajos durante más de ocho años”.
Vilafranca ha agradecido la colaboración del Ejecutivo de Marga Prohens, “que garantizará que dispongamos de una carretera moderna y segura”, a la espera de recuperar el convenio de carreteras con el Gobierno central.
El primer mandatario de Menorca ha anunciado que en junio empezarán las obras del tramo de Talatí y en octubre, las de Rafal Rubí.
Vilafranca se ha referido también a la necesidad de “empezar a estudiar una solución de futuro” para el tratamiento de residuos en Menorca.
El Consell tiene garantizada la prestación del servicio en el vertedero de Milà, por concesión, hasta el año 2040, pero cree que ya debe empezar a plantearse una de las dos opciones “con importantes afectaciones ambientales y económicas”, como es sacar los residuos fuera de Menorca o tratarlos en la isla, “ya sea mediante incineración u otra solución tecnológica”.
Vilafranca ha aludido asimismo a la acogida de inmigrantes menores no acompañados y ha apuntado que se ha tenido que abrir un segundo centro en la isla para hacer frente a la situación heredada, en que las residencias destinadas a este fin se hallaban al 200 % de su capacidad.
El presidente del Consell ha aprovechado, en este sentido, para rechazar la política migratoria del Estado, al que ha reclamado que deje de tomar decisiones unilaterales y actúe de forma coordinada con las comunidades autónomas.