La Infanta Cristina, hermana del rey Felipe VI, deberá sentarse en el banquillo de los acusados por dos presuntos delitos fiscales por el Caso Nóos. Así lo ha dictaminado el juez Castro. El magistrado la considera cooperadora necesaria para defraudar 330.000 euros en las declaraciones de renta de 2007 y 2008 de su marido Iñaki Urdangarín.
La decisión va en contra de la petición de la Fiscalía Anticorrupción que solicitaba para ella el archivo del caso. Por su parte, Manos Limpias pide para la Infanta ocho años de cárcel y dos millones de euros.
El fiscal anticorrupción Pedro Horrach ya anunció que si se imputaba a la esposa de Urdangarín no descartaba recurrir el auto a pesar de que es irrecurrible. Horrach considera que en este caso se vulnera la Ley de Enjuiciamento Criminal.