El Ministerio de Justicia británico ha anunciado que en las próximas semanas presentará una nueva legislación que fijará una cantidad máxima para las reclamaciones de turistas británicos que hayan denunciado haber sufrido una enfermedad durante sus vacaciones en el extranjero. Con esta modificación, el gobierno británico pretende dar respuesta a la petición del sector turístico para que se frenen las miles de denuncias falsas por intoxicación alimentaria presentadas en los últimos años, muchas de ellas en Balears.
Este fin de semana, la noticia ya ha sido comunicada por operadores británicos a diversas cadenas hoteleras de las islas que la han recibido con notable satisfacción. La decisión se produce en puertas de la temporada de verano, periodo en el que más se han producido este tipo de fraudes.
La nueva legislación, anunciada este viernes por el Ministerio de Justicia británico en su web, marcará la cantidad máxima que los turistas podrán reclamar después de haber sufrido una enfermedad en el transcurso de sus vacaciones. En la práctica significará frenar en seco las denuncias por falsas intoxicaciones con las que miles de turistas y un buen número de despachos de abogados especializados en reclamaciones de este tipo han venido presentando en los últimos años. Concretamente, la Asociación de Agentes de Viajes Británicos (ABTA) calcula que las reclamaciones por enfermedad vacacional han aumentado en un 700 por ciento en los últimos años, pasando de las 5.000 registradas en 2013 a las 35.000 en 2016.