Con la autorización de Ports de Balears, el puente que tiene la parte final del puerto antiguo hacia Es Pla, escenario de uno de los momentos más esperados de la fiesta de Sant Joan, tendrá una red que cerrará el paso a los vasos de plástico u otros elementos que otros años acababan en el agua y que la corriente se llevaba después mar adentro.
El trabajo de la asociación Per la mar viva se centra en demostrar con estudios que la presencia de plásticos o basura en el mar se puede evitar. Con la instalación de esta red que llega a cierta profundidad además de recoger los plásticos que flotan, esperan evitar que -como sucedía otros años- se llene el puerto de vasos de plástico de un solo uso.
La presencia de plásticos en el puerto o en la costa se podría reducir de manera importante con algunos gestos. Y las fiestas de San Juan, donde se utilizan mucho los plásticos de un solo uso y donde aumenta de manera considerable la población estacional es una de esas oportunidades para hacer las cosas mejor. Según Carlos de Salord, en un solo año se han recogido algo más de 900 kilos de plástico en una zona muy concreta de Ciutadella.
Aunque el gesto consciente de cada ciudadano tiene mucho que ver en que estos plásticos acaben en el medio natural (en concreto en el mar) no se debe olvidar que la administración podría hacer algunas cosas que evitarían que esta basura acabara flotando en el agua. Por ejemplo: ser más firme en el tratamiento de residuos que se dan en el caso de obras urbanísticas y los residuos que generan, muchos de los cuales acaban volando con el viento hacia la costa. De la misma manera, los contenedores amarillos deberían tener unas gomas que evitan que los plásticos que entran puedan salir de nuevo por acción de las corrientes de aire.
Al acabar las fiestas se recogerá la red y su contenido para valorar si esta acción ha conseguido su objetivo.