La ‘Federació de la petita i mitjana empresa de Menorca’ ha emitido un comunicado en el que detalla cómo se está desarrollando la temporada turística del verano 2018. Los datos no son positivos: un 60,47% de las empresas turísticas encuestadas afirmaron haber disminuido su facturación con respecto al 2017.
Tal y como explica PIME, las empresas habían apostado este año por una mejora de los servicios, reflejado en una mayor contratación y empleo. No obstante, se han topado con que la temporada sigue una evolución negativa.
Apuntan, también que ‘con la aprobación de la delimitación de las zonas aptas para la comercialización de estancias turísticas en viviendas de uso residencial, el Consell Insular de Menorca no ha escuchado las necesidades de las pequeñas y medianas empresas de Menorca y no ha favorecido en absoluto que pequeños propietario participen de la actividad turística de Menorca.’
Por sectores, según las encuestas realizadas por PIME. el modo en el que la mala temporada les está afectado es el siguiente.
El agroturismo ha visto su facturación reducida, y únicamente un 12,50% de ellos han incrementado su facturación en julio respecto a 2017.
Por otra parte, el alquiler de vehículos se declara como el peor sector, ya que del total de las pequeñas empresas de alquiler de coches de Menorca, un 84,21% ha visto reducida su facturación.
En cuanto al comercio, solo un 8,05% han visto incrementada su facturación.
También hay bajada en las viviendas turísticas vacacionales, que PIME asocia con las restricciones del Consell.
Por su lado, un 14,81% de las empresas náuticas han experimentado un ligero incremento en su facturación, pero el resto se mantiene igual o disminuye.
Por último, el sector que se considera más ‘afortunado’, en comparación al resto de los encuestados, es el de las cafeterías, bares y restaurantes. PIME considera la mejoría ‘insignificante, dentro de la peligrosa situación general’.