El descenso en la llegada de turistas de este año en torno al 3,5% en julio y agosto también afecta a las ventas del producto estrella de la Isla, el queso Mahón-Menorca, pero este descenso preocupa poco a los productores.
La caída del turismo internacional en los meses punta del verano ha supuesto el descenso en las ventas. En lo que respecta al sector del comercio se cifra en un 56% los establecimientos que en agosto redujeron su facturación respecto al año anterior según afirma la patronal PIME. Uno de los artículos afectados es el queso con Denominación de Origen Mahón-Menorca. Así lo asume el presidente del Consejo Regulador, Bosco Triay, pero descarta cualquier alarmismo porque confía ciegamente en que se compensará con un incremento en las exportaciones.
Triay recuerda que desde hace años cada vez se vende más queso fuera de España y por ello confía confía en lograr unos números casi idénticos a los del ejercicio anterior en que se vendieron 2.564 toneladas de queso de Mahón lo que supuso 17 millones de euros.
Las exportaciones en 2017 ya supusieron el 12,5% del total con EEUU como principal destinatario de las piezas de queso que se vendían a otros países.