“En estos momentos son muchas las zonas boscosas de la isla en donde se puede apreciar una gran cantidad de bolsas de procesionaria. Las orugas ya las han abandonado o bien lo están haciendo estos días, lo que provoca una importante desfoliación de los pinos, en especial los más jóvenes” asegura la Asociación de Empresarios Forestales de Menorca, ASEFOME.
Además, señala ASEFOME, “de esos devastadores perjuicios medioambientales, la plaga está ocasionando daños sanitarios a las personas que bien por ocio o bien por cuestiones laborales, como los trabajadores de las empresas forestales, se encuentran en las zonas infestadas por la plaga”.
Así se lo han comunicado al Conseller balear de Medio Ambiente al que solicitan “que cara al próximo otoño se estudie realizar de nuevo fumigaciones aéreas con productos medioambientales adecuados. Medida que se ha comprobado como la más eficaz para controlar la plaga”.
ASEFOME considera que “es preocupante que estos últimos años las medidas que se han dispuesto por parte de la Consellería de Medio Ambiente para mantener controlada la plaga han resultado poco eficaces. Lo cual ha provocado el importante rebrote que ahora padecemos”.