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Los bomberos menorquines se especializan en luchar…contra el agua

En 2018 realizaron 820 intervenciones muchas de ellas por inundaciones en locales

Más actividad.
Más actividad.
El mal tiempo provocó más incidentes que motivaron la actuación de los bomberos

Durante  2018 los bomberos del Consell en Menorca realizaron 820 intervenciones. Se trata de  135 más que el año pasado que fueron 685. Este aumento viene marcado por el aumento de actuaciones relacionadas con inundaciones, hay que recordar que 2018 fue más lluvioso de lo normal, y también viene marcado por los incidentes ocasionados por el tornado que se dio el pasado mes de octubre. Así consta en la memoria de 2018 del cuerpo que de dio a conocer este jueves.

También destaca el aumento de los auxilios y salvamentos y asistencias técnicas para prevenir riesgos  en la vía pública. Este hecho también viene provocado por el aumento de los fenómenos meteorológicos adversos durante el pasado año.

Por otra parte, el número de incendios forestales fueron pocos y de escasa afectación.

La vicepresidenta del Consell y titular de Serveis Generals, Cristina Gómez,  destacó el esfuerzo que ha hecho la institución insular en la compra de nuevo material. En concreto, la adquisición de 7 nuevos vehículos. Gómez  incidió en la importancia de que una unidad de servicios tan importante e imprescindible dentro de nuestra sociedad cuente con un material y unas condiciones mínimas que permitan velar por la seguridad de Menorca.

En cuanto a la mejora de las instalaciones, se ha destacado el nuevo espacio para vestuario EPIS y de almacén en el parque de Maó y las mejoras en el aula de formación del Parque de Ciutadella consistentes en la instalación de aire acondicionado y calefacción

En 2018 se adquirieron dos autobombas forestales pesados ​​(BFP), una en marzo para el parque de Maó, y una en diciembre para el parque de Ciutadella. También destaca la renovación de los equipos de rescate de tráfico en el parque de Ciutadella y se prevé que este año se pueda hacer en el parque de Maó, y la adquisición de máscaras nuevas para los equipos de respiración asistida.

En lo que se refiere a la plantilla, durante  2018 se produjeron dos jubilaciones, un cabo y un bombero adscritos al parque de Maó. Ya se han cubierto las dos vacantes. También se han nombrado 2 cabos nuevos. Así, ahora se dispone de 4 cabos cada parque y de esta manera se va acercando más al objetivo de disponer siempre con un cabo por turno de guardia.


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