La máxima competición futbolística del panorama nacional, es decir, la Liga, está a punto de escribir su último capítulo. Este año nos ha ofrecido magníficos partidos que quedarán grabados en la memoria de los aficionados a este deporte. El Barça ha culminado una temporada majestuosa que lo ha coronado como campeón, aun así, esta es una de las pocas certezas que nos ha dejado hasta ahora el campeonato. Todavía quedan por definir cuáles serán los equipos que disputarán la Segunda División la próxima temporada, un descenso al infierno que todos quieren evitar. También está por ver cuáles serán los equipos que disfrutarán de una travesía apasionante por Europa, bien sea en la Champions League o en la Europa League.
La Liga nos deparará muchas sorpresas, similares a las que se han visto en la pasada jornada electoral, un panorama imprevisible que ofrecerá grandes éxitos y fracasos. Uno de los equipos que se encuentra inmerso en la batalla por Europa es la Real Sociedad. El conjunto txuri-urdin es uno de los asiduos a este tipo de luchas; este curso ha mostrado un rendimiento altamente regular que hace que actualmente ostente la novena posición de la tabla. Entre todos los magníficos jugadores que nutren sus filas, hay un nombre que guarda relación con nuestro territorio: Jon Bautista. Nacido en Maó en 1995, ha realizado toda su carrera profesional en la Real Sociedad, y esto siempre genera simpatías entre los seguidores. Este año ha disputado un total de 19 partidos, 18 en la Liga y 1 en la Copa del Rey, anotando un gol en la competición de la regularidad.
Bautista forma parte del selecto grupo de futbolistas que todavía tiene opciones para clasificarse para la Europa League; las posibilidades son bajas, pero en el fútbol nada es imposible. Los jugadores de la Real no dependen de ellos mismos, pero al menos intentarán agotar las posibilidades matemáticas. El equipo tendrá que afrontar tres partidos de una importancia capital y el primero será ante el Alavés, ni más ni menos que un derbi para seguir vivos en el barro. Más allá de conseguir el triunfo, los jugadores deben ganar dos partidos más que el Athletic. También es necesario que otros equipos con opciones no puntúen, como es el caso de Betis o Espanyol.
El primer duelo en esta final improvisada fue el Alavés, como hemos comentado anteriormente. El partido se disputó en Mendizorroza y los dos equipos fueron absolutamente a por todas, aunque el afortunado de llevarse los 3 puntos fue la Real Sociedad. El conjunto Babazorro se encuentraba una posición por encima en la clasificación; sin embargo, tras el encuentro disputado, ambos equipos se encuentran con los mismo puntos, ganando la Real Sociedad la partida del gol average.
El segundo partido enfrentará a la Real con el Real Madrid. Después de una temporada altamente decepcionante, el Madrid no se jugará absolutamente nada más que su orgullo herido. Cuando se generan situaciones como esta es normal que el equipo que aún se encuentra en la lucha por los puntos se imponga en el partido. Uno de los elementos a favor que tendrán los vascos es que el partido se disputará en Anoeta. El duelo tendrá lugar el próximo 12 de mayo a las 18.30 horas.
El partido que pondrá punto final a la competición es el que enfrentará a la Real con el Espanyol. Se jugará el 19 de mayo y será seguramente con horario unificado. Se espera que los dos equipos estén inmersos en la lucha por Europa, por lo tanto se presupone como un duelo especialmente intenso. El equipo txuri-urdin se despedirá de la temporada lejos de casa. Veremos cuál será la aportación de Bautista en este tramo trascendental del curso, si realiza buenas actuaciones personales seguro que ganará peso en la jerarquía futbolística del equipo. Un punto a favor que le puede ir excepcionalmente bien de cara a afrontar el próximo año. Las oportunidades llegan a base de constancia y con otro elemento muy importante: la suerte. Y esta llega para quien la busca. Estaremos pendientes de su evolución en los próximos enfrentamientos.