J. L. Llagües
El apagón producido ayer por el fallo de una turbina en la central térmica de Maó afectó a un 33 % de los transformadores -o centros de distribución- que hay en la isla. Así, el suministro de vio afectado en más de un tercio de los cerca de 1.300 puntos de distribución que hay en la isla, lo que arroja un porcentaje del 33 %.
Los fallos en el sistema duraron una media de 20 minutos y se vieron afectados un total de 22.260 contratos de suministro de energía. Hubo cortes en toda Menorca, salvo en Maó, Sant Lluís, Cala en Porter y algunas urbanizaciones del sureste.
Las personas que residen en zonas cercanas al puerto de Maó notaron una densa humareda, causada por el fallo en una turbina, por lo que las otras dos tuvieron que redoblar esfuerzos y gastar más combustible. Todo apunta que al registrar el fallo, fue el mismo sistema el que automatizó los cortes para prevenir problemas. Así, los expertos consultados por Menorcaaldia exponen que “es difícil identificar el porqué se eligieron unos transformadores y no otros. Hoy en día hay mucha automatización de procesos y en casos de emergencia el sistema puede tomar algunas decisiones”.
