La construcción de una segunda desnitrificadora que potabilice el agua de los depósitos de Turó en Maó que abastecen a media ciudad o la interconexión entre esta infraestructura y la de Malbúger costarán milllones de euros. Por ello “habrá que planificar muy bien cómo hacerlo y buscar financiación de otras administraciones ya que, de lo contrario, se deberá repercutir el coste en las tarifas de los usuarios”. Así lo señala el titular de Sostenibilitat del Ajuntament de Maó, Rafa Muñoz.
De esta manera el 100% del casco urbano podría recibir agua con un nivel de nitratos aceptable. Por ahora, sólo gozarán de agua buena, una vez se construya la primera desnitrificadora, las zonas de Vía de ronda, Tanques del Carme, Andrea Dòria y alrededores.
Cabe recordar que la primera desnitrificadora de Malbúger tiene desde de esta semana pasada el permiso para iniciar unas obras que, seguramente, comenzarán de forma efectiva en noviembre. Su finalización se calcula para marzo de 2020. Posteriormente deberá esperar la autorización de Sanidad para poder potabilizar agua que se mezclaría con otra contaminada con nitratos hasta rebajar el nivel de estos elementos hasta cotas aceptables.