Cuando el informe se refiere a basura en el mar estamos hablando de los elementos que recoge el Servicio de embarcaciones amarillas del Govern Balear, que tienen una especie de pinzas en la parte delantera y que “patrullan” las costas de Menorca, especialmente en los meses de verano. Aceites, materia orgánica, maderas, vegetación y plásticos principalmente.
Los datos que se recogen demuestran que es en el mes de agosto cuando mayor presencia de basura hay, lo que coincide con la mayor afluencia de turistas. Además, el 80% de la basura procede directamente del territorio, es decir, que llega a través de la costa o el curso de torrentes hasta el mar. Un día ventoso puede ser suficiente para que acaben flotando en el mar muchos plásticos que proceden de las zonas costeras.
Los registros muestran que a lo largo de los últimos años ha habido menos kilos de basura recogidos debido a que hay menos número de embarcaciones dedicadas a este servicio. Menorca redujo en un 73% el volumen de recogida a partir del año 2011 por este motivo. De toda Baleares, Menorca aportó una media del 20% de los residuos que flotaban en el mar balear.
Según concluye el informe: “El tipo de embarcación utilizada en el servicio de limpieza de litoral condiciona la cantidad de toneladas recogidas anualmente. Las embarcaciones de tipo litoral (Pelicà) son las más efectivas, ya que se recogió mayor peso anualmente (173-423 toneladas) durante los años en que fueron operativas (2004-2010). Posteriormente (años 2011-2019), la cantidad recogida no supera las 110 toneladas anuales”.
Los plásticos suponen la mitad de la basura que flota en nuestro litoral y los estudios muestran que acaban entrando en la cadena alimentaria a través de lo que ingieren los peces, en diferente grado según la especie.
Luego nada de echarle la culpa a otras costas. La mayoría se genera en Menorca, y aún encima van y recortan barcos de limpieza. Un premio a los gestores, y otro al incivismo de la gente…