Eran muchos días sin baloncesto en Bintaufa. Y el Hestia Menorca ha querido volver con alegría. La que concede cada triple de Corbacho, o la tercera juventud de Pitu Jiménez. La mano de Menno, o la fuerza interior de Urko Otegui. Eso ha mezclado a la perfección ante el Basket Navarra en un ilusionante estreno, que han podido disfrutar alrededor de 1.000 personas (87-69).

Y eso que el equipo de Pamplona ha sembrado de dudas el inicio. Los puntos de Seoane, estelar con 24 tantos y 7 rebotes- y los bajos porcentajes en el perímetro del grupo de Oriol Pagès -0/4 en triples-, han permitido a los visitantes adquirir pequeñas rentas (8-12, 17-19).

Hasta que en el segundo cuarto, la aparición en pista de Alberto Corbacho y Adrián Méndez ha cambiado el escenario. Dos triples del mallorquín han dado con un parcial de 9-0 que ha sacudido el encuentro, que ha sufrido un cambio de gobierno hasta el descanso (43-32).

El Navarra, lleno de bajas, ha notado el plomo en las piernas de la escasa rotación, mientras fiaba su ataque a la producción de Antúnez y Seoane. Pero el Hestia Menorca ya se había sacudido la presión e iba lanzado. La ventaja se ha ido hasta los 18 puntos con la aparición de Menno y Xavi Hernández (62-44, tercer cuarto). 

Ha sido entonces cuando el equipo de Bintaufa ha bajado la intensidad y ha concedido al Basket Navarra la opción de soñar con la reacción. Pero con 12 abajo a falta de 3′, un triple de Menno y dos acciones de 2+1 de Urko Otegui han liquidado la cita. El Menorca empieza con triunfo y sigue emitiendo buenas vibraciones.

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