Las compañías aéreas y marítimas solo podrán preguntar por la condición de residente de las Baleares al final del proceso de venta y no al principio como se venía haciendo hasta ahora, una actuación que originaba aumentos de precios de los billetes para los residentes en las islas. Así lo ha anunciado este viernes el conseller balear de Movilidad, Marc Pons, que ha señalado que la Ley de Presupuestos del Estado para 2021 establece esta obligatoriedad.
Pons ha recordado que esta era una reivindicación que hace tiempo el Govern balear había realizado al gobierno estatal al confirmar que comunicar la condición de residente al principio del proceso de venta implicaba un aumento de precios por parte de las compañías aéreas y marítimas.
El objetivo de esta obligación es que el descuento de residente, del 75%, repercuta en los residentes de las islas y no en la cuenta de resultados de las compañías.
Los presupuestos estatales para 2021 reflejan una partida de 212 millones de euros para las bonificaciones de viajes de los residentes de las islas.
Esta nueva medida se llevará a cabo a partir del 1 de marzo porque, según ha señalado Marc Pons, “el redactado de la ley da dos meses a las compañías para que modifiquen su procedimiento de compra”.
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