Mora: “la Sindicatura de Greuges de Menorca debe concitar un notable consenso social”

La presidenta del Consell de Menorca, Susana Mora, ha salido al paso de las críticas vertidas por los grupos de la oposición sobre el aplazamiento del nombramiento de las nuevas miembros de la Sindicatura de Greuges de Menorca. Sin mencionar en ningún momento el nombre de Bárbara Coll, “desde la máxima consideración hacia la honorabilidad y el buen nombre de las personas implicadas”, Mora ha emitido un comunicado en el que resuelve que considera “conveniente aplazar la decisión del Pleno de la institución para que los portavoces de los grupos políticos puedan analizar y tratar con detenimiento la cuestión suscitada” porque “las personas miembros de la Comisión de Greuges deben concitar un notable consenso social para garantizar el reconocimiento público a su imparcialidad y poder contar, así, con una suficiente confianza social a la hora de ejercer su misión”.

Susana Mora señala que “de acuerdo con el reglamento de la Comisión de Greuges, los candidatos deben tener un perfil independiente y de prestigio en el ámbito social y profesional y deben ejercer su función de forma altruista y con objetividad, libertad de criterio e independencia”.

“No podemos olvidar que son las personas encargadas de velar por la ecuanimidad, objetividad, rigor legal y transparencia en la toma de decisiones por parte de la administración ante cualquier agravio que cualquier ciudadano o ciudadana haya podido sufrir por parte de esta”, destaca Mora al tiempo que niega que alguien haya “puesto en duda en ningún momento la honorabilidad de ninguna persona propuesta, y mucho menos lo ha hecho así ningún miembro del gobierno del Consell”.

Recordar que el nombramiento de Bárbara Coll como miembro de la Sindicatura ya había sido aceptado por los portavoces de los grupos políticos del Consell de Menorca. Pese a eso Susana Mora señala en el comunicado que “siempre desde el máximo respeto al derecho a la libertad de expresión, conviene que cualquier proceso de nombramiento se haga siempre desde la máxima consideración hacia la honorabilidad y el buen nombre de las personas implicadas. Aún más lo debe ser en este caso, dadas las características tan singulares de la Comisión de Greuges”.