El informe es un repaso completo y exhaustivo de todo tipo de aspectos relacionados con el mar. En estas líneas fijamos la atención en aspectos concretos de su fauna y flora.
En su capítulo de hábitats protegidos se cita a la planta marina Posidonia oceánica, característica del Mediterráneo. Forma praderas en zonas de hasta 40 metros de profundidad. Tiene una amplia variedad de beneficios ecológicos (retiene carbono, oxigena el agua, forma hábitats con mucha biodiversidad, produce arena y protege la costa).
En Menorca mantuvo un debate sobre su retirada o no de las playas por su efecto natural y de regeneración del sistema dunar frente a la imagen y olores que alejaba al turismo. Según la cartografía presentada en el estudio, la costa sur, especialmente entre Son Bou y el Cap d’Artrutx, es la zona donde hay mayor densidad de praderas de esta planta.
El coral del fondo del Canal de Menorca se encuentra en una profundidad de entre 50 y 100 metros y se compone de algas calcáreas que se acumulan formando un sustrato duro pero también hay un hábitat de fondos profundos (> 200 metros) con presencia de corales que se encuentran protegidos por normativa nacional e internacional. Algunos ejemplos de especies de corales de profundidad son: corales negros, plumas de mar, coral rojo y coral bambú.
En el caso de Menorca se han detectado sobre todo en la zona sur de la isla.
Tras el episodio del año pasado donde una tortuga marina desovó en una playa urbana (Punta Prima) y en otra playa más de la costa, se ha puesto mayor atención a esta especie. La tortuga marina o tortuga boba (Caretta caretta) es un reptil marino de la familia Cheloniidae. La concha puede superar el metro de longitud y pesar hasta 200 kg. Se encuentra en las aguas del Atlántico, el Pacífico, el Índico y el mar Mediterráneo; en este mar es la tortuga marina más abundante, con una población estimada de 25.000 ejemplares en la cuenca Argelina (entre las Islas Baleares, Murcia, Córcega y el norte de África). El informe destaca que el plástico sigue siendo la principal causa de varamiento de esta especie, también en Menorca.
Respecto a la nacra (pinna nobilis), es la especie de molusco bivalvo más grande del mar Mediterráneo. Este animal filtrador se puede encontrar únicamente en este mar, donde vive fijado al sustrato durante décadas, y puede alcanzar una longitud de 120 cm. Su presencia indica una buena calidad del agua y de la planta marina Posidonia oceanica, su hábitat preferente.
Además, esta especie promueve la biodiversidad, ya que su gran tamaño proporciona hábitat a numerosas especies. Junto a Cabrera, la costa menorquina es donde se han localizado las nacras de mayor tamaño. Actualmente está en grave peligro de extinción por culpa de un patógeno y se han detectado ejemplares vivos que se monitorizan para estudiar su evolución. Antes del denominado evento de mortalidad de 2016, en Menorca se censaron 323 individuos.