A partir del 1 de junio, las farmacias de Balears gestionarán de forma telemática los vales de mórficos que hasta el momento funcionaban a través de talonarios en papel, lo que repercutirá en una mayor agilidad y seguridad en la gestión de mórficos. En el año 2020, la Dirección General de Prestaciones y Farmacia entregó 1.087 talonarios a las oficinas de farmacia, lo que supone un total de 108 .700 vales.
La Dirección General de Prestaciones y Farmacia, con el objeto de mejorar la calidad de los servicios que presta a la ciudadanía, apuesta por la inversión en nuevas tecnologías y la contribución a la mejora del medio ambiente, por lo que ha iniciado la implantación de un sistema de gestión de vales de estupefacientes electrónicos, utilizando la aplicación del gestor de vales de estupefacientes de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).
Hasta el momento, los farmacéuticos pedían los talonarios de mórficos a la Conselleria de Salud y Consumo, quien los remitía por correo certificado a las farmacias. Después, las farmacias, en función de sus necesidades, solicitaban la compra de mórficos utilizando los vales en papel que mandaban a los almacenes distribuidores de medicamentos de uso humano autorizados para su suministro. A partir de ahora, todo este proceso manual se sustituirá por una herramienta informática, sin el uso de papel y la circulación de vales en papel.
Una vez superadas las fases de análisis, desarrollo, integración y homologación por parte de los agentes implicados, la AEMPS autorizó el inicio de la fase piloto, que empezó el día 26 de abril y que está previsto que termine a finales del mes de mayo.
En esta fase han participado los 5 almacenes de distribución de medicamentos autorizados para distribuir estupefacientes en Balears y 30 oficinas de farmacia.
Una vez finalizada la fase piloto con éxito, se hará extensivo a todas las oficinas de farmacia de las Illes Balears, que son 442. Los talonarios en papel se mantendrán como recurso y como plan de contingencia en el eventual caso de que se produjera una caída del sistema informático.