A menos casos, menos rastreo…
Sí, hemos notado una disminución importe de la carga de trabajo, sobre todo desde enero. La curva va a la baja y es de agradecer porque pasamos unos meses de noviembre, diciembre y enero muy malos. No dábamos abasto. Empezábamos la jornada con positivos pendientes del día anterior, lo cual nos frustraba muchísimo.
La vacuna se nota. ¿Siguen siendo el mismo número de rastreadores?
No, continuamos alrededor del 50 por ciento, tanto profesionales sanitarios -enfermeras, técnicos de laboratorio, fisioterapeutas, psicólogas y Técnicos en Cuidados Auxiliares de Enfermería- como militares. Somos menos pero más que suficientes para cerrar el círculo diario de casos. Nos vamos a las 20 horas, cuando se cierra la central, con los casos hechos y los contactos estrechos rastreados.
¿Cuántos contactos estrechos detectan por positivo?
En la última semana, de media, son 30 casos por día y aproximadamente 100 contactos estrechos al día, lo que se traduce en una media de unos 3,5 contactos estrechos por cada positivo.
Lo que más crece son los brotes mixtos (familiar-social), es decir, contagios en familia que luego se trasladan al grupo de amigos o viceversa
La cifra no ha subido respecto a meses peores y eso que ahora se nota más relajación social por la fatiga…
Sí, paradójicamente se están manteniendo. No hay un aumento preocupante, que es lo que nos temíamos con la flexibilización de medidas. Es cierto que aún hay que esperar algunos días para que afloren todos los casos pero en líneas generales, la gente se sigue comportando con responsabilidad.
Perfil. ¿Más joven?
Sí, lo que más crece son los brotes mixtos (familiar-social), es decir, contagios en familia que luego se trasladan al grupo de amigos o viceversa. Y es lógico. Todos tenemos muchas ganas de salir así que el brote ya no se queda sólo en casa, como ocurría en los periodos fuertes de confinamiento o restricciones severas, sino que se traslada a otros núcleos.
Cuando indagan en esos encuentros sociales, ¿llegan a terrazas?
Llegamos a que se producen en comidas, cenas o encuentros en cualquier ámbito, desde un local a una casa particular. Hay de todo.
¿Y brotes laborales? Por aquello que se está recuperando la actividad…
No muchos, la verdad. Los servicios de prevención están muy atentos a estos casos y realizan cribados inmediatos.
Alrededor del 15 por ciento de los positivos diarios son turistas. Por eso hemos montado un equipo de rastreadores sólo para los turistas
El presidente Pedro Sánchez ha anunciado que la mascarilla dejará de ser obligatoria en exteriores el próximo sábado. ¿Lo temen?
Cualquier relajación de medidas, sea la que sea, nos da miedo: aforos, movilidad, viajes, mascarilla… Nos ponemos en tensión positiva y nos preparamos psicológicamente para que, en los próximos días pueda haber más contagios. Dicho esto, entendemos que la gente tiene que comer y que la actividad económica se tiene que poner en marcha. Por tanto, la paulatina flexibilización de medidas forma parte de la normalidad y la recuperación.
¿Qué han pensado cuando han visto tantos botellones?
Lógicamente, no nos gustan, son un peligro. Entendemos que la gente joven necesita un respiro -todos hemos tenido esa edad y hemos querido irnos de fiesta- pero en el escenario actual los botellones son un peligro. Pedimos máxima prudencia.
Según datos oficiales, en Balears apenas ha llegado la variante india.
Sí, apenas le puedo contar de ella porque casi no ha habido. Nosotros seguimos rastreando como siempre, sólo que ahora somos más exhaustivos porque tenemos más conocimientos y más tiempo. En marzo del año pasado, por ejemplo, no sabíamos por dónde nos daba el aire. Con el paso del tiempo, vas puliendo la técnica y haces entrevistas más precisas. Cuando preguntamos por la sintomatología, por ejemplo, tenemos muy presentes distintos factores que pueden encendernos las alarmas. No todo es tos, fiebre y pérdida de olfato.
Entendemos que la actividad económica se tiene que poner en marcha. Por tanto, la paulatina flexibilización de medidas forma parte de la normalidad y la recuperación
Ahora que estamos con el aire acondicionado y los cambios bruscos de temperatura, habrá quien se piense que “ha cogido frío”…
Sí, hay que estar muy alerta a nuestro estado de salud. Todo lo que sea anormal debemos consultarlo con InfoCovid o el centro de salud. Por ejemplo, si eres alérgico de toda la vida y después de estar debajo de un platanero te entra la tos y estornudas, entra dentro de lo normal. Sin embargo, si no eres alérgico no deberías estar así. O el caso de una persona que nunca se constipa por el aire acondicionado y que en cambio ahora está destemplado: debe consultarlo con su médico. Hemos llegado a destapar positivos por parestesias (cuando se te duermen los dedos).
Del total de casos rastreados, ¿qué porcentaje representan los turistas?
Alrededor del 15 por ciento de los positivos diarios son turistas. Una vez detectados, seguimos el rastro de sus contactos estrechos, ya sean familiares o personal de los locales a los que han asistido. En ese caso, contactamos con el establecimiento, le informamos que tal día a tal hora ha albergado a una persona que ha dado positivo en coronavirus y le ofrecemos realizar un cribado para ver si aflora algún positivo.
Para rastrear estos casos hay que hablar alemán, francés, ingles…
Sí, y por eso hemos montado un equipo de rastreadores sólo para los turistas porque, efectivamente, deben dominar su idioma para comunicarse correctamente y lograr resultados óptimos.