Durante miles de años, la planta del cannabis se ha utilizado con fines medicinales y terapéuticos en diferentes culturas y sociedades. No obstante, en las últimas décadas, esta planta se ha visto envuelta en numerosos escándalos y mitos por ser únicamente relacionada con su consumo lúdico y los “colocones”.
Las últimas investigaciones realizadas sobre la marihuana han evidenciado que uno de sus componentes, el CBD, puede proporcionar alivio a ciertas condiciones y enfermedades físicas y mentales. Además, es posible sustraer este componente y apartarlo del THC, la sustancia que provoca los efectos psicoactivos y la dependencia.
Gracias a estas investigaciones, el CBD ha comenzado a ganar popularidad en todo el mundo. Esta sustancia natural es algo más que el segundo cannabinoide más abundante en la planta del cannabis sativa: las investigaciones científicas han descubierto que puede suponer múltiples beneficios para la salud y el descanso.
El primer paso que debemos dar para entender que el CBD no es un componente perjudicial, sino todo lo contrario es el de aprender a diferenciarlo de otros componentes del cannabis como, por ejemplo, el THC.
El THC es otra de las más de 100 sustancias que tiene la planta del cannabis y, en concreto, es la causante de los efectos psicoactivos que se producen al ingerir o fumar la planta. Consumir esta sustancia sí puede provocar colocones, adicción e, incluso, episodios de ansiedad o paranoia cuando se abusa del consumo.
Sin embargo, el CBD produce los efectos contrarios. Esta sustancia se considera un cannabinoide no psicoactivo y es capaz de contrarrestar los síntomas de ansiedad provocados por el THC. Al consumir CBD de manera aislada podemos disfrutar de sus atributos sedantes, eficaces para el tratamiento de diversas patologías físicas y psíquicas.
Generalmente, el CBD se extrae de la planta y se diluye en un aceite de cáñamo o coco para su comercialización en este formato. Sin embargo, también puede comprarse en cogollos directamente. Estos cogollos de marihuana son analizados en un laboratorio, asegurando que contienen niveles de THC inferiores al 0,2% y, por tanto, que son legales en España.
Los cogollos de CBD se pueden adquirir en cualquier punto de España, incluídas las islas, de forma completamente legal. Por lo tanto, si estás en Palma de Mallorca y quieres consumir un CBD de buena calidad y mínimamente tratado, puedes hacerlo comprando los cogollos por internet y recibiéndolos a domicilio con todas las garantías.
Tras los últimos estudios publicados, muchos profesionales de la salud han comenzado a recomendar a sus pacientes el uso de CBD para reducir sus achaques. A continuación, vamos a ver cuáles son los principales beneficios de esta planta para la salud mental:
Propiedades neuroprotectoras
Los últimos estudios científicos publicados en este campo sugieren que el CBD puede ayudar a pacientes con trastornos neurológicos como la epilepsia o la esclerosis múltiple.
Esta sustancia natural contiene propiedades neuroprotectoras que pueden actuar sobre el sistema endocannabinoide del organismo y reducir la espasticidad muscular que puede ser resistente a otros medicamentos de prescripción.
De hecho, en el año 2018, la Food and Drug Administration (FDA) de Estados Unidos aprobó el Epidiolex (un producto con CBD) como tratamiento para las convulsiones causadas por los trastornos neurológicos.
Aumenta la calidad del sueño
El sueño es uno de los factores más importantes para nuestro bienestar, calidad de vida y salud. Dormir menos horas de las necesarias puede hacer que las personas seamos más propensas a sufrir enfermedades cardiacas, depresión u obesidad entre otros problemas.
Sin embargo, el CBD ha demostrado ser efectivo para combatir los problemas del sueño que padecen algunas personas. Al mejorar la calidad del sueño y dormir más horas seguidas, mejoramos nuestro descanso, recuperamos la vitalidad perdida y ganamos en bienestar y salud.
Reduce los niveles de ansiedad
En la última década, el número de personas que padecen ansiedad en el mundo ha aumentado exponencialmente. Se trata de una enfermedad a la orden del día y con la que resulta muy complicado convivir.
Algunos estudios realizados en los últimos años apuntan a que el CBD contiene propiedades naturales capaces de aliviar y reducir los síntomas de la ansiedad y el estrés. Por este motivo, muchos profesionales de la salud mental han comenzado a recomendar la utilización de CBD para el tratamiento de algunos tipos de ansiedad como el TOC, los trastornos de pánico, el estrés postraumático o la ansiedad social.
En cualquier caso, hay que tener en cuenta que para conseguir estos beneficios hay que prescindir del THC, la sustancia psicotrópica. Los cogollos que se comercializan en España de forma legal tienen unos niveles de THC inferiores al 0,2%, por lo que son aptos y seguros para este uso.
Eficaz contra la depresión
Según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en la actualidad más de 322 millones de personas en el mundo sufren depresión.
Aunque los efectos antidepresivos del CBD aún están sometiéndose a múltiples estudios, la evidencia científica comienza a apuntar que este componente del cannabis es capaz de aumentar los niveles de serotonina en el cerebro y, por tanto, prevenir y actuar contra la depresión.