Tras la baja de Marrow, el equipo menorquín se ha transformado, su juego y sus opciones ofensivas, que pasaban en muchos casos por el base americano, han cambiado, los roles son ahora distintos y La Roda será una buena oportunidad para evaluar esa transformación en un equipo que, forzosamente, ahora es distinto.
Ya se pudo comprobar una mejoría ante el Real Canoe, con Pitu Jiménez al mando de las operaciones y con los liderazgos anotadores mucho más repartidos, el equipo logró un triunfo que, aparte del valor clasificatorio, tiene un componente de autoestima innegable.
Para la cita de este domingo el técnico del equipo menorquín recuperará al senegalés Makhtar Gueye, una vez resueltos sus problemas burocráticos que le han impedido estar presente en los últimos encuentros.
La Roda será el reto del “nuevo” Hestia Menorca, un reto que se presenta difícil, no en vano es uno de los equipos más en forma del Grupo Este. El equipo manchego ocupa la cuarta posición con 11 victorias y 7 derrotas, por lo que un triunfo menorquín sería vital para dar alcance y superar a los de Albacete.
Radshad Davis es uno de los jugadores más determinantes del equipo entrenado por Antonio Javier Moya, su tarjeta de presentación así lo pone de manifiesto, 12.6 puntos, 5.4 rebotes y 13.6 créditos de valoración.
Otro de los jugadores a vigilar de cerca es un viejo conocido de la afición menorquina, Quim Salvans, que se está mostrando como uno de los jugadores más determinantes del grupo manchego. La columna vertebrar rodense se completa con Adón, Mcdonald, Sanz y Konate.
El partido se jugará este domingo, a partir de las 19 horas, en el Pabellón Juan José Lozano Jareño, siendo Javier Sáez y Francisco Olmos los encargados de impartir justicia.