Ciento cincuenta años después de que la abuela de Albert Camus emigrase a Argelia desde su Menorca natal, se ha cerrado el círculo con la visita de la hija del escritor, acompañada de toda su familia. Una visita cargada de emoción en la que Catherine Camus ha viajado acompañada de sus dos hijos, Anthoine y Therese, sus nietos y sus biznietos para conocer el municipio de Sant Lluís, donde nació Catalina María Cardona, su bisabuela.
La hija del que fuera Premio Nobel de Literatura en 1957, ha expresado su agradecimiento y su emoción como también la de toda su familia, al poder recorrer las calles del municipio y asistir a las Trobades y Premis Mediterranis Albert Camus. A sus 77 años, Catherine Camus ha manifestado que de su padre heredó “su voluntad de ser libre y de amar la vida”.
Ayer sábado asistió a la proclamación del ganador del III Premi Mediterrani Albert Camus, que ha recaído en el escritor francés Mathias Enard y de la ganadora del II Premi Incipiens de proyectos periodísticos otorgado a la periodista egipcia Rehab Eldalil.
Por la tarde asistió a la proyección de la película Les vies d’Albert Camus de Georges-Marc Benamou, a la que precedió una conferencia a cargo de Anne Proteau, actual Presidenta de la Societé des Etudes camusiennes, con el título “Vivir es no resignarse”.
Las Trobades & Premis Mediterranis Albert Camus cuentan con el respaldo de la familia del escritor y de la Sociedad de Estudios Camusianos y nacieron de una idea de Miguel Ángel Moratinos —exministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación de España y defensor de la Cultura mediterránea—, quien promueve su organización junto con el Ayuntamiento de Sant Lluís y el patrocinio de la Fundació Foment del Turisme de Menorca.
