Sin duda, una de las mejores formas de ahorrar dinero en la factura de la luz es la instalación de placas solares. Con los precios de la electricidad tan elevados, el autoconsumo es una opción muy popular. Eso sí, instalar placas solares no es tan fácil, y es necesario saber unas cuantas cosas antes de lanzarse definitivamente a su instalación.
Una de las principales ventajas de las placas solares es su elevada vida útil. Estas placas suelen tener una vida de entre 30 y 35 años. Esto ya compensa en gran medida la inversión inicial a realizar, ya que suele amortizarse en unos 8 años aproximadamente.
Todo esto sin contar la gran cantidad de subvenciones, bonificaciones y reducciones de impuestos que existen para apostar por este tipo de fuente de energía.
La amortización anteriormente citada puede suponer un enorme ahorro en la factura de la luz. A partir de que hayas recuperado la inversión, estarás generando kilovatios gratuitos.
Las placas solares suelen ser fáciles de instalar. Los expertos realizan un estudio del perfil de consumo de familia y el tipo de cubierta de la vivienda. Así se instalará la placa más adecuada al perfil, adaptándolo a las características individuales de la familia. Después, se dará de alta y se legalizará la instalación.
Si tienes una vivienda unifamiliar, es fácil instalar una placa solar. En este caso, el estudio irá orientado al tipo de cubierta, orientación de la casa y también si existen o no sombras que puedan dificultar. Además, debe existir un espacio para el transformador de corriente continua a alterna, el cual se conoce como inversor.
Si vives en un piso, la cosa es más complicada, ya que no sólo depende de ti. Las comunidades de propietarios tendrán que ponerse de acuerdo para el uso de zonas comunes. Si todos se ponen de acuerdo, puede crearse un sistema de autoconsumo compartido, que permita ahorrar dinero a todos los vecinos.
.- Este es un artículo de vivirhogar.republica.com y AMIC para Menorcaaldia
