Los ciberdelincuentes están utilizando una nueva forma de tratar de estafar el dinero con el pequeño comercio local como principal objetivo. Según explica el jefe del grupo de Delincuencia Económica y Tecnológica de la Policía Nacional, Simón Sánchez, el modus operandi es el de una llamada telefónica en el que los criminales se hacen pasar por una institución o empresa y alegan la existencia de una deuda que, de no satisfacerse, implicaría el cierre del negocio. Aseguran que el superior jerárquico del trabajador con el que han contactado está al corriente de todo y que avala este pago.
La transacción económica debe realizarse mediante criptomonedas u otros sistemas difíciles de rastrear. Por ello desde la policía piden que, si se encuentran ante una situación similar, contacten primero con sus superiores y que rechacen este tipo de pagos.