Es lo que tiene esta liga, equipos históricos, con mucha tradición ACB e incluso con títulos importantes. Es el caso del San Pablo Burgos, siguiente rival al que se enfrentará el Hestia Menorca, un equipo que es campeón por partida doble de la Basketball Champions League y diseñado para recuperar la máxima categoría del básquet nacional.
Los menorquines viajaran a Burgos con la intención de reafirmar su buen momento de juego y resultados, 3 victorias en los últimos 4 partidos y la única derrota ante el Estudiantes, dejando grandes sensaciones que invitan a seguir siendo optimistas.
Javi Zamora analiza en la web del club el momento actual por el que está pasando el equipo, “El equipo salió reforzado a pesar de vivir una derrota, y eso es un indicativo de que la plantilla está a un nivel competitivo muy alto. Lo luchamos, lo competimos y no tuvimos premio, pero el equipo salió con muchas ganas de ponerse el mono de trabajo otra vez y tratar de preparar el siguiente partido contra otro auténtico equipazo”.
El técnico tiene claro cuales son las claves del partido, “Tenemos que estar muy sólidos, sabiendo que va a ser un partido largo, que pueden castigar los errores y que tendremos que estar muy bien defensivamente para poder tener opciones de ganar”.
El rival será otro histórico del baloncesto español, el San Pablo Burgos, un equipo que no está atravesando su mejor momento de la temporada pero a poco que le salgan las cosas va a ir para arriba, actualmente es sexto clasificado.
Lorenzo Encinas, entrenador del equipo, dispone de amplios recursos para hacer daño en distintas posiciones. De entre todo el ramillete de jugadores destacan el esloveno Lapornik, un escolta que es una de las claras referencias del equipo, con una gran mano desde el 6.75 y promediando 13.5 puntos y 15.6 créditos de valoración.
Al esloveno se le unen hombres como los bases Corbalán y Speight, dos buenos directores de orquesta y buenos anotadores, el pívot Fischer, auténtico dueño de la pintura, o el alero Jiménez, también poseedor de una buena mano desde el exterior.
El partido, al que asistirá un nutrido grupo de aficionados menorquines, se jugará este sábado a partir de las 20 horas en el Coliseum Burgos.