Con el aumento del coste de vida y la dificultad para acceder a la vivienda debido al alza de precios, cada vez más personas jóvenes consideran la opción de tener dos trabajos para hacer frente a sus necesidades económicas. Sin embargo, ¿es esta una solución viable? La respuesta depende de diversos factores, y es importante sopesar tanto los beneficios como los inconvenientes de esta decisión.
En primer lugar, es crucial evaluar cómo afectará una carga laboral adicional a tu día a día. Compaginar dos empleos puede brindarte múltiples fuentes de ingresos, lo cual puede ser beneficioso en caso de perder uno de ellos en algún momento. Sin embargo, esta situación también puede dificultar la conciliación entre el trabajo y la vida personal, debido a la falta de tiempo libre. Quien es joven puede plantear que tendrá energía para todo pero, ¿cuánto tiempo podrá mantener el buen tono físico y psicológico para llevar dos cargas?
En cuanto al aspecto fiscal, es importante tener en cuenta que tener dos trabajos no implica necesariamente pagar más impuestos a Hacienda. El impuesto sobre la renta (IRPF) se calcula de manera global, por lo que no se paga más por tener varios empleos. Sin embargo, es fundamental asegurarse de que los pagadores estén reteniendo correctamente el IRPF, ya que puede ocurrir que el segundo pagador retenga menos de lo debido, lo que requerirá una compensación en la declaración de la renta.
Es importante destacar que compaginar dos trabajos es completamente legal, siempre y cuando no exista una cláusula de exclusividad en el contrato que prohíba trabajar con otras empresas. Además, es fundamental respetar las horas de descanso entre jornadas laborales.
Existen diversas situaciones en las que una persona puede tener dos pagadores en un mismo año, como un cambio de empleo, la combinación de un trabajo con colaboraciones freelance o pasar de estar desempleado a trabajar con una nueva empresa.
Sin embargo, antes de decidir tener varios trabajos, es fundamental evaluar detenidamente si esta situación es recomendable para tu vida personal y financiera. Aunque tener múltiples fuentes de ingresos puede ser beneficioso, también puede suponer un desafío en términos de conciliación y gestión del tiempo.
Si decides optar por tener varios trabajos, es importante llevar un control exhaustivo de tu situación financiera y establecer un presupuesto mensual para gestionar tus gastos. También es recomendable establecer objetivos financieros claros para alcanzar una estabilidad económica a largo plazo.