Un grupo de estudiantes de Menorca ha emprendido un emocionante viaje hacia el espacio, desafiando las expectativas y abriendo nuevas fronteras en el ámbito aeroespacial. Conformado por cuatro alumnos de bachillerato, una estudiante de segundo de ESO y otra en formación profesional de informática, este equipo multidisciplinar está llevando a cabo un proyecto innovador que podría colocarlos en la vanguardia de la ingeniería espacial.
Provenientes de dos institutos menorquines, el IES Pasqual Calbó y Caldés, y el IES Joan Ramis y Ramis, este grupo de jóvenes talentosos está participando en el desafío CanSat, una iniciativa de la Agencia Espacial Europea que desafía a estudiantes de toda Europa a construir y lanzar un minisatélite del tamaño de una lata de refresco.
Bajo el nombre de “CanSat 2023-2024 Menorca Space Exploration Initiative”, estos estudiantes están trabajando incansablemente para adaptar todos los principales subsistemas que se encuentran en un satélite en un espacio tan reducido. Desde la energía hasta los sensores y el sistema de comunicación, cada detalle se está cuidando meticulosamente para garantizar el éxito de la misión.
El equipo se encuentra actualmente en una fase crucial del proyecto, buscando colaboraciones y donaciones para continuar con su investigación y desarrollo. Esta búsqueda de apoyo externo resalta el compromiso y la dedicación de estos jóvenes hacia su sueño de explorar el espacio y contribuir al avance de la ciencia y la tecnología.
El concurso CanSat representa no solo un desafío técnico, sino también una oportunidad para estos estudiantes de desarrollar habilidades en diseño, ingeniería, trabajo en equipo y resolución de problemas. Desde la selección de objetivos de la misión hasta la realización de pruebas y verificaciones, están siguiendo los procedimientos habituales de un proyecto espacial con determinación y entusiasmo.
Este proyecto no solo representa un hito para los estudiantes de Menorca, sino también una inspiración para las futuras generaciones de ingenieros y científicos. Con su pasión, creatividad y dedicación, estos jóvenes están demostrando que el cielo ya no es el límite, y que el espacio es el nuevo horizonte para explorar y descubrir.