Es Castell vive los atardeceres de los lunes de forma especial. Instalan su mercado nocturno y las calles se llenan de visitantes y vecinos. Incluso algunos restauradores de Cales Fonts afirman que los lunes la gente tarda más tiempo en acercarse a sus locales debido a las tiendas que se instalan con artesanía de todo tipo.
En el caso de ayer de Es Castell, al mercado hay que sumarle una actuación que realizaron los amigos del Salón en Cala Corb que generó otro foco de interés.
El éxito de los mercados nocturnos no es una exclusiva de Es Castell. El resto de poblaciones tienen actividades iguales o similares. Este sería el caso de Maó que carece de mercado pero los martes, con las ‘Nits de música al carrer’, ve como hay tiendas que aguantan las persianas hasta más tarde de lo habitual.