Este 31 de octubre, fieles a la tradición, numerosos vecinos de Maó se han acercado a lo largo de la mañana al cementerio municipal para rendir homenaje a sus seres queridos. Han depositado flores frescas y cuidado con esmero tumbas, nichos y otros lugares de descanso, dedicando un tiempo a recordar a quienes ya no están. Para evitar las aglomeraciones propias de esta fecha, es habitual que las visitas se realicen tanto en los días previos como posteriores a Todos los Santos. |