Se llaman Buyo, Duman, Jaleo Fester, Justi, Nonte, Ondulada -la única yegua-, Anco, Zar Menorquí, Zuco RF, Xanu, Xifoner TB, Xiquilin y Xubec. Y son los trece nuevos equinos que forman parte del catálogo de reproductores de Caballos de Pura Raza Menorquina que publica la Asociación de Criadores y Propietarios de la isla. La edición 2015 de este informe -la tercera en orden cronológico- cuenta con 62 páginas de extensión y se convierte en toda una obra de referencia para calibrar la salud de una raza autóctona que es una de las señas de la cultura local. El grupo de investigación Meragem es el responsable de la confección del informe.
Cada uno de los ejemplares cuenta con una ficha propia, donde se especifica su sexo, año de nacimiento, su criador y su titular. También se detalla su árbol genealógico y su lista de descendientes -en caso de que los tenga-.
Los autores del documento exponen que el catálogo “es una herramienta que los genetistas y la Asociación de Criadores elaboran con el objetivo de difundir información útil para los ganaderos en el diseño de los apareamientos, al aportar datos complementarios y fiables del potencial genético que tiene cada animal, tanto desde el punto de vista selectivo (valores e índices genéticos) como conservacionista (coeficientes de consanguinidad y de parentesco)”.
A su vez, desde la Asociación de Criadores también apuntan que “la valoración de reproductores es una evaluación que deben pasar los caballos y yeguas de la raza a partir de los 3 años de edad para que su descendencia pueda registrarse en el Libro Genealógico oficial. Un veterinario y un juez morfológico se desplazan a las ganaderías donde evalúan la calidad racial de los animales y la ausencia de defectos descalificantes”.
Por otra parte, en el catálogo se incluyen dos tipos de animales según su categoría genética, Reproductores Mejorantes (RM, animales valorados genéticamente por su descendencia) y Jóvenes Reproductores Recomendados (JRR, animales valorados genéticamente en base a sus propios méritos). Para los RM las fichas ocupan dos páginas y se incluye información sobre sus descendientes y ascendientes, y el propio animal. En el caso de los JRR, solo ocupan una cara con la información del animal y sus ascendientes.
Reconocida como raza autóctona por la jefatura de Cría Caballar del Ministerio de Defensa en 1988, el caballo menorquín es apreciado dentro y fuera de la isla como un animal noble y de gran porte. Y los grandes causantes de la notable reputación son sin duda las personas que han velado -y velan- por que sus rasgos genéticos propios no se pierdan. El catálogo es una herramienta dedicada a ellos.
A su vez, en la edición 2015 del informe se explica los estilos de monta -conocido como “anar de brilla”- y doma menorquinas, claves a la hora de evaluar. Y se realiza una enumeración de todos los equinos con valoración positiva para la contribución de la especie local.
El grupo de investigación genética Meragem -que cuenta con científicos de las universidades de Sevilla, Córdoba y Madrid– es otro de los precursores del catálogo.
Hasta el 16 de marzo
A su vez, la Asociación de Criadores y Propietarios acaba de abrir la primera convocatoria para los valoraciones para reproductores con tres o más años de este año. Los interesados deben entregar la pertinente solicitud en la oficina de la entidad y tienen de plazo hasta el próximo 16 de marzo. Las valoraciones se llevarán a cabo durante la primera quincena de abril. En un año se pueden hacer al menos 3 convocatorias de valoraciones.
Por último, según datos del Registro Genealógico del Caballo de Raza Menorquina en 2014 habían 3.680 animales censados, de los que 2.973 se encontraban en Baleares. También había ejemplares en países como Francia, Italia, Suiza o Alemania. El decidido trabajo de los grupos de investigación y los criadores locales durante los últimos dos años seguro que ha hecho que el conjunto haya crecido.
@jlgllagues