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Lull y el Real Madrid doblegan al Valencia Básquet

El equipo blanco alcanza la final de la liga Endesa tras un apretado partido (80-82)

Tirando del carro.
Tirando del carro.
El base de Maó ha liderado al Real Madrid en anotación. (Foto: Real Madrid)

No habrá quinto partido. El Real Madrid y el base menorquín Sergi Llull ya esperan rival para la final de la liga Endesa. El conjunto blanco ha superado al Valencia Básquet tras un apretado final y tan solo le queda un escalón para llegar al título. Era un partido a vida o muerte para los “taronja” y los de Pablo Laso han tenido que sudar de lo lindo para llevárselo.

Tras la eliminación por una técnica en el anterior encuentro de la serie, el playmaker menorquín ha vuelto a la titularidad en el día de hoy y se ha enfrentado desde el principio a Guillem Vives, héroe del cuarto encuentro. Llull ha comenzado mandando en el ritmo del partido y los visitantes lograban la primera ventaja holgada tras un 2-10 de inicio. El primer cuarto finalizaba con un marcado de 18-25 y las sensaciones eran plácidas para los madridistas. La montaña aún tenía que ser escalada.

En el segundo cuarto el guión era parecido. El conjunto de Laso alcanzaba un 9 de 15 en triples tras cincos canastas seguidas desde esa distancia y los engranajes funcionaban, sobretodo en ataque. Sin embargo, los valencianos comenzaban a apretar un poco más al final del periodo y la distancia se reducía (38-44). Seis puntos no eran garantía de nada.

Y todo se dinamitó en el tercer cuarto. Pedro Martínez -menorquín de adopción- apostaba por situar a sus torres juntas y la conexión entre Hamilton -ensombrecido por un gran Ayón en casi toda la eliminatoria- y un gran Dubljevic funcionaba. El Valencia Básquet se ponía por delante (51-50) a falta de 2’49” y el partido ya era otro. Era momento de ponerse el mono de trabajo y bajar al fango, ya que se llegaba al cuarto periodo con un empate y muchas incógnitas (53-53).

La canasta “marca de la casa”

En el último cuarto la tensión se cortaba con cuchillos desde el inicio. Locales y visitantes encadenaban grandes defensas y aciertos y Sergi Llull tenía tiempo de marcarse su ya típica jugada “marca de la casa”: un triple imposible. Al final, el encuentro ha desembocado en un carrusel de faltas y de tiros libres que ha caído del lado madridista. Con 16 puntos y 20 de valoración, el base de Maó fue de nuevo un pilar para los suyos. Aún queda la serie final. Nadie dijo que esto iba a ser fácil. Ni mucho menos.

@jlgllagues


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