105 incendios y 213,79 hectáreas quemadas. Ese es el balance hasta el 15 de octubre que ha presentado este jueves el Govern balear a través de la Conselleria de Medi Ambient, cifras que desde el Ejecutivo califican de “positivas” atendiendo a que ha sido un año de fuerte sequía.
El conseller Vicenç Vidal ha explicado en la presentación del informe que los más de 100 siniestros de esta temporada en las islas se sitúan en la media de la última década y ha señalado que si bien “quizá los incendios no han sido significativos en hectáreas, sí lo han sido en las zonas afectadas”.
Vidal ha asegurado que uno de los más peligrosos fue el ocurrido en Es Mercadal el pasado 6 de septiembre ya que “fue de noche y con peligro para las personas”. Las llamas arrasaron ese día 36’7 hectáreas y tuvieron que desalojarse un gran número de vecinos y turistas.
“Los medios y técnicos de la conselleria han hecho un trabajo magnífico porque en condiciones complicadas, como es un año de sequía, hemos tenido una temporada que podemos calificar de positiva”, ha asegurado la presidenta del Govern balear Francina Armengol.
