La previsión para la comunidad es superior, un 3’7%, en parte gracias al buen comportamiento de islas como Ibiza. Aunque la tendencia positiva y el índice de confianza empresarial son buenos, el conseller de trabajo, comercio e industrial del Govern de les Illes Balears Iago Negueruela, no lanza las campanas al vuelo.
Hay temas no resueltos que lastran unos mejores resultados. En el acto de presentación de los datos este jueves mentó la precariedad de los contratos temporales que han llevado a la aparición de nuevos perfiles de exclusión social, como el caso de los trabajadores eventuales con un sueldo pero que no pueden pagar servicios básicos. En este último año se han descubierto casos de trabajadores -sobre todo en las Pitiüses- que pese a tener un trabajo remunerado, no podían hacer frente al precio del alquiler de una vivienda en verano. También se consolidan los perfiles de pobreza energética. Se puede ser optimista, pero hace falta mejorar muchos flecos en la economía de las islas que no avanzan como quisieran.
El Cercle de economia de Menorca, en el boletín del tercer trimestre del año pasado, hacía referencia a los efectos del Brexit, la fuerza del factor de inversión o un consumo que no despega. Con los datos del Govern, veremos si se cumple este porcentaje de crecimiento y si, aunque más lento, continua subiendo hacia arriba la economía de la isla.
