El Juzgado número 2 de Maó ha acordado este jueves mantener el lanzamiento de un piso de la avenida Fort de l'Eau en el que residen una mujer de 59 años que cuida de su hermana en silla de ruedas, aquejada de una discapacidad medular, y su padre de 87 años.
La jueza mantiene la orden de desahucio para este viernes, pese a la petición manifestada por el propietario del inmueble de dar un mes de plazo a la familia afectada para que pueda encontrar una vivienda alternativa y aplazar así el lanzamiento hasta el 30 de enero.
Ante esta decisión, que ha cogido por sorpresa a los inquilinos del piso y a los colectivos ciudadanos que les dan apoyo, se mantiene la llamada a la población para que acuda a las ocho de la mañana de este viernes frente al número 155 de Fort de l'Eau para evitar con su presencia que se haga efectivo el desahucio.
Mensaje en redes
"No podemos permitir que una familia vulnerable quede en la calle", reza el cartel que, difundido a través de las redes sociales, insta a hacer presión en defensa de los afectados.
El juzgado ya rechazó en su día el informe de vulnerabilidad económica de la familia, lo que llevó al Juzgado a dictar un auto, ahora refrendado, en el que ordenaba el desahucio de la vivienda.
El contrato de alquiler expiró hace un año, pero el propietario accedió a dar doce meses de margen para hallar un alojamiento que respondiera a las especiales necesidades de la familia afectada.
Los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Maó han informado a los afectados que carecen de espacios alternativos donde alojarlos mientras logran alquilar otra vivienda.
