Las festividades de Todos los Santos y de los Fieles Difuntos llega puntual como cada año a principios de noviembre. Y lo hace con flores, plegarias, pensamientos acunados en la mente y el corazón y una queja: morirse en España puede costar hasta diez veces el equivalente al salario mínimo interprofesional. De media, el coste es de 3.700 euros (cinco veces más el SMI), un desembolso que se ha incrementado desde que en 2012 el IVA de los servicios funerarios subió del 8 al 21 por ciento.
Así lo ha denunciado la plataforma social para consumidores Populetic.com (www.populetic.com), después de analizar los costes de un entierro en las diferentes ciudades españolas, un análisis del que se desprende que Barcelona, con cerca de 6.500 euros, es la ciudad más cara el SMI, fijado actualmente en 645,30 euros) mientras que Cuenca y Santa Cruz de Tenerife con 2.300 y 2.400 euros de coste, respectivamente, encabezarían la lista de las ciudades españolas más económicas.
Populetic.com denuncia especialmente los procedimientos de buena parte del sector, ya que “aprovechan el pésimo momento anímico de la familia, que desde luego no está para negociar precios, para añadir a la factura una serie de servicios y productos como si fueran de obligatoria contratación y que al final del sepelio muchos no han sido utilizados”, explica David Ciudad, fundador de esta plataforma social para consumidores.
Tanatorios, ataúdes, coches de acompañamiento y flores son algunos de los muchos elementos que entran en juego en el momento de la defunción. El coste medio ronda los 3.500 euros aunque depende de la ciudad, de si se opta por la incineración o inhumación en nicho, de si se dispone o no de seguro, entre otras cuestiones. En este sentido, alrededor de 20 millones de personas tienen contratada una póliza de decesos (asistencia y pago del sepelio) en España y, según denuncia Populetic.com estas compañías incurren con demasiada frecuencia en incumplimientos a través de matices, verdades a medias o cargos innecesarios.
La plataforma recuerda que cuando se contrata una póliza se puede recibir el dinero en efectivo para pagar los costes del sepelio o dejar que la aseguradora se encargue de contratar todos los servicios. “Es importante tener en cuenta que si la aseguradora presta todo el servicio se debe recibir la parte sobrante del capital garantizado en la póliza. Algunas compañías intentan a menudo cambiar la devolución en efectivo por otros servicios que suelen ser innecesarios, como por ejemplo servicios de tanatopraxia o simplemente añadiendo más flores en los tanatorios”