La Alianza Mar Blava sigue tratando de averiguar quién realizó los sondeos acústicos que se detectaron en aguas baleares en abril de 2013 y cuya autoría la consellería de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio del Govern atribuyó inicialmente a la compañía Seabird Exploration.
Así mismo, la Alianza quiere saber dónde se llevaron a cabo en realidad (en qué zona estaba actuando el barco con los cañones de aire comprimido, airguns) y si, de haber sido en aguas españolas, la empresa o entidad que los realizó, contaba con autorización de la Administración.
A fecha de hoy, según han explicado Alianza, no han recibido contestación alguna por parte del ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente a su solicitud de información ambiental al respecto de estos sondeos acústicos, presuntamente ilegales, pese al tiempo transcurrido desde su primera petición formulada el 11 de agosto.
El colectivo está intentando recabar información del ministerio puesto que, a su juicio, ni la autoría de Seabird Exploration respecto a estos sondeos ni la existencia de autorización para realizarlos quedan claros de acuerdo con la documentación que le ha entregado la conselleria de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio del Govern.
Lo que sí deduce Alianza Mar Blava, “incluso dando por buena la conclusión que plasma la Consellería en su informe de 8 de septiembre de 2014 de que el foco emisor de esos sondeos se encontraba “fuera del mar Balear” y, en cualquier caso, “muy lejano a las aguas de las Islas Baleares”, (es) que esos sondeos acústicos produjeron afecciones sobre espacios y variables ambientales a nivel balear”.