Si durante estos días usted ha paseado por los puertos de Maó y Ciutadella -entre otros emplazamientos de la isla- seguramente se ha topado con un superyate de casi 60 metros de eslora que durante estos días está conociendo diversos puntos de la isla.
Se trata del Bacarella, un navío de auténtico lujo que en el año 2012 fue valorado en más de 63 millones de euros por diversas firmas especializadas donde se puso a la venta. Al final fue vendido, aunque se desconoce su dueño actual.
Construido en 2009 por la empresa Trinity Yachts, este megayate cuenta con una estética clásica y un diseño interior de todo lujo gracias a los detalles aportados por la prestigiosa marca Bannenberg &Rowell Design.
Puede alojar con toda comodidad a un grupo formado por una docena de personas, ya que cuenta con un espacioso camarote principal, cuatro habitaciones para invitados y un segundo espacio para visitantes VIP. Todos sus ocupantes disfrutarán de sinuosos viajes a una velocidad media de 14 nudos.
Todo tipo de servicios
Y es que, como suele ocurrir en este tipo de casos, el Bacarella pone a disposición de sus usuarios todo tipo de servicios. Cuenta con zonas de ocio de alta tecnología, un gimnasio en cubierta para ejercitarte rodeado por el mar y hasta un helipuerto para realizar pequeñas escapadas a zonas cercanas.
Antes de venir a la isla, el buque estaba atracado en Puerto Banús (Málaga). Os dejamos con un vídeo colgado en la red social Youtube donde se puede ver el inicio de su viaje hacia Menorca…
@jlgllagues
