La consellera de Ordenación Territorial y Turística, Susana Mora, ha presentado hoy en el Consell las bases que regirán el Plan de Desarrollo Turístico de Menorca (PDTM). Un instrumento que, según ha dicho la vicepresidenta primera de la institución insular, “se fundamenta en el diálogo, la participación y el consenso político”.
Mora ha explicado que el PDTM nace como una herramienta para planificar y gestionar el turismo en un territorio determinado con un objetivo establecido. En este caso la elaboración de este plan de desarrollo turístico insular viene marcado por el Plan Integral de Turismo de las Islas Baleares, donde se establece que en las Islas Baleares se ha de implantar un modelo de turismo responsable. “El PDTM es una necesidad porque vivimos un punto de inflexión en la economía menorquina donde el turismo es el principal motor de la economía de la isla“, ha defendido Mora. La portavoz del Consell también ha subrayado la necesidad de trabajar el PDTM de manera transversal con el Govern, los ayuntamientos de la isla, el sector empresarial, el tejido asociativo y la ciudadanía a través de las asociaciones de vecinos, así como con los diferentes departamentos del Consejo Insular de Menorca.
Las principales razones defendidas por Mora para hacer un PDTM son:
- Porque así lo demanda la Ley 8/2012, de 19 de julio, del Turismo en las Islas Baleares en el artículo 70 punto 2.
2. Porque a finales del año 2013 y principios del 2014 los 8 municipios de Menorca redactaron sus planes de desarrollo turístico, pero el plan de desarrollo turístico a nivel insular no se llegó a redactar.
3. Porque los 8 ayuntamientos deben renovar sus planes de desarrollo turístico y se hace necesario disponer de un plan a nivel insular que sirva de documento marco para la elaboración-revisión de los planes de desarrollo turístico de los municipios.
4. Porque es del todo necesario que un destino maduro como Menorca disponga de un plan de turismo donde se defina el modelo y estrategia turística para Menorca, inventariando los recursos turísticos de la isla y sobre todo definiendo acciones a corto, medio y largo plazo.
Susana Mora también ha señalado que durante el mes de noviembre se ha iniciado un proceso de participación social y que a finales del mes de mayo del 2017 se espera haber completado los plazos y objetivos establecidos.
La redactora del Plan, el ambientóloga y consultora en turismo y medio ambiente Marta Pérez ha explicado la hoja de ruta a seguir durante el proceso de planificación como una primera parte de antecedentes y diagnóstico de la situación actual, el inventariado de los principales recursos turísticos con los que cuenta Menorca, la definición del modelo y estrategia turística, o los objetivos, necesidades y prioridades a tener en cuenta; además de las conclusiones. “El Plan tendrá una duración hasta el año 2025 y se revisará cada dos años“, ha destacado.
Calendario a seguir
Por su parte la directora insular de Ordenación Turística, Elena Costa, ha detallado el calendario del Plan de participación llevado a cabo con diferentes encuentros con los ayuntamientos de la isla y presentaciones, así como la difusión de un formulario (que se lanzará vía online la próxima semana) para que pueda participar de manera directa la ciudadanía. “Esta será un primer paso muy importante para cumplir con el Plan de participación”, señaló. En cuanto al calendario a seguir, Costa ha explicado que en diciembre se desarrollará un análisis DAFO para detectar las fortalezas y debilidades de Menorca como destino turístico; y en enero y febrero de 2017, un grupo de estrategia trabajará a partir del DAFO a través de mesas de recursos.
Todos los resultados y conclusiones derivados de los formularios y Plan de Participación se tendrán en cuenta a la hora de redactar el Plan de Desarrollo Turístico de Menorca, se prevé tener el primer borrador del PDTM a finales del mes de marzo, y que sea una herramienta útil para el sector y los ayuntamientos de la isla. “Este plan, aparte de definir el modelo turístico presente y futuro que queremos para Menorca debe servir para determinar qué carencias tiene el destino y cómo se han de superar. Por lo tanto, la voluntad es consensuar con todos los agentes implicados un plan de desarrollo coherente, que sea aplicable y de utilidad para mejorar el destino”, han apostillado desde el Consell.
