A veces, los descuidos causan algún susto que podría evitarse. Es lo que ocurrió ayer sobre las diez de la noche en una zona de Son Bou. Los bomberos de Maó y la Policía Local de Alaior tuvieron que acudir a sofocar un pequeño incendio que brotó tras descontrolarse una quema de matojos.
Las llamas se ocasionaron en un terreno ubicado entre el hotel San Valentín y el antiguo restaurante Ópera, que actualmente recibe el nombre de Es Forn de Torre Solí, y se extendieron unos 150 metros. El siniestro no fue a mayores, quizás por la presencia de la lluvia.
Los bomberos aconsejan extrema prudencia ante este tipo de situaciones. El pasado 11 de diciembre -hace diez días- también acudieron a apagar un pequeño foco al rebrotar unas cenizas dejadas en un contenedor tras su uso en una salamandra. Siempre es mejor prevenir.