Menorca espera que la añada de 2017 produzca menos vino que en años anteriores pero de una calidad mucho mayor debido al calor de este verano y también a la sequedad del año que evitó enfremedades varias. Así lo señalan los productores isleños del Vi de la Terra de l’Illa de Menorca que una vez más no dan abasto para cubrir la demanda existente.
El vino con denominación de origen de Menorca de 2017 será especialmente bueno, pero habrá menos según los productores isleños. Así lo indica su portavoz, Toni Salord. Las razones de este hecho son básicamente dos.
Por un lado el fuerte calor hizo que las vides ‘sufrieran’ y produjeran menos cantidad de uva, pero de mayor calidad. Por otro lado hay que destacar que 2017 fue un año más seco de lo habitual. Esto dificultó la aparición de hongos por lo que las plantas apenas tuvieron enfermedades y fueron mucho más sanas.
No obstante, este verano seco impidió que la producción de uva fuera tan buena como en 2016. Si entonces se produjeron 1.544 hectolitros de vino, el año pasado esta cantidad bajó a 1.290 hectolitros.
Esta reducción en la cantidad de vino agrava un problema endémico. El producto menorquín es muy apreciado tanto en al isla como fuera. Así se constata en las catas y concursos internacionales, pero al ser una producción mínima las existencias no permiten llegar a todas partes. Esto ha llevado a varios viticultores a adoptar una medida drástica. Han dejado de exportar botellas para poder proveer al comercio y los restauradores de la Isla todo el año y no quedarse sin vino a medida que pasan los meses.
En la actualidad Menorca tiene nueve productores de vino con indicación de origen
