Este puede ser un día singular. Por un lado el cambio horario estacional nos quita una hora. A las dos de la madrugada pasarán a ser las tres. Eso sigue provocando muchas molestias entre los que han de reajustar sus horarios vitales. El motivo que se haga así viene de una propuesta que hizo en su día Benjamin Franklin.
En el año 1784, cuando el entonces embajador de Estados Unidos en Francia Benjamin Franklin envió una carta al diario Le Journal de París donde proponía algunas medidas para el ahorro energético. Sus propuestas fueron imponer un gravamen a las personas cuyas contraventanas impidiesen la entrada de luz a sus habitaciones, regular el consumo de cera y velas y hacer repicar las campanas de la iglesia al amanecer para que todo el mundo se levantase a la misma hora.
Estas propuestas no se tomaron en serio, pero al poco tiempo comenzaron los primeros experimentos de iluminación con gas, cuya peligrosidad hizo plantearse seriamente el tema del ahorro energético con lo que, poco a poco, las ideas de Franklin fueron retomándose y evolucionando hasta llegar a la conclusión de que lo más conveniente era cambiar la hora, una medida que no se instauró plenamente hasta 1974. No todos los países la aplican hoy.
Además, hoy sábado 24 de marzo, la asociación ecologista WWF propone como cada año apagar las luces de plazas, edificios destacados o casas particulares. Se trata de un acto para ahorrar energía y mandar un doble mensaje; en favor el ahorro y en favor de frenar el cambio climático.
La primera Hora del planeta se celebró en Sidney el 31 de marzo de 2007, entre las 19:30 y las 20:30 horas. El ahorro de energía en la ciudad durante ese tiempo se estimó entre el 2,1 % y el 10,2 %, mientras que la participación de los habitantes se calculó en 2,2 millones. Inspirada en el proyecto australiano, la ciudad de San Francisco, en California, EE. UU, decidió lanzar su propio proyecto, llamado Lights Out (“Apaga las Luces”).
Siguiendo el ejemplo de Sidney y San Francisco, los organizadores decidieron programar la hora del planeta para el 28 de marzo de 2008, de las 20:00 a las 21:00 horas, participaron en este apagón voluntario 35 países y 400 ciudades alrededor del mundo, muchas otras ciudades en Canadá y otros países adoptaron el evento el sábado 29 de marzo de 2008, de 19:30 a 20:30 horas. Para el año 2010 la Hora del Planeta se celebró el 27 de marzo de 20:30 a 21:30 horas, hora local en cada país. En 2011, la Hora del Planeta se llevó a cabo en 5251 ciudades en 135 países y territorios de todos los continentes. En Estados Unidos esta fecha coincide con el National Dark-Sky Week, un evento en el cual, durante una semana, los habitantes de Estados Unidos apagan las luces de sus hogares para observar la belleza del cielo nocturno, sin la interferencia de la luz artificial.