La presidenta del Govern, Francina Armengol, que ha presidido la reunión del Consejo Balear de Transporte, ha explicado que “uno de los compromisos” de legislatura era “trabajar de manera integral la movilidad” y “este plan se ha elaborado con el espíritu de involucrar a todas las administraciones”.
El conseller ha dicho que “se trata de un plan global y para que sea factible es fundamental tener una visión de conjunto y contar con la colaboración institucional”.
Así, el PDSM tiene como pilares la mejora del servicio de transporte público y un progresivo cambio de paradigma en la movilidad, en el cual la utilización del coche privado debe perder peso.
Además de la mejora del transporte público, el PDSM establece medidas que faciliten la menor utilización del coche, como la creación de aparcamientos disuasivos en el anillo externo de los núcleos urbanos o de carriles bus-VAO en las principales vías, entre otros, para que sea más rápido ir en bus que en coche privado.
De esta manera, la previsión es que el plan permita incrementar de manera muy significativa la demanda de pasajeros del transporte público: pasando de 61,10 millones de viajeros anuales a entre 84,4 millones y 108,7 millones.