Las encuestas dicen que, por vez primera, el PSOE podría ganar en Baleares en unas autonómicas…
Es cierto que las encuestas nos posicionan en esa situación y eso es algo agradable —sonríe—. Las encuestas denotan siempre tendencias y las actuales son positivas para mi partido. Ahora bien, nadie se puede relajar, porque las cosas no están hechas y la única encuesta que vale es la de las urnas. Para que el Partido Socialista gane las elecciones de este próximo 26 de mayo, necesitamos que muchísima gente vaya a votar y que vote con ilusión y ganas al PSOE. En las elecciones generales del pasado 28 de abril tuvimos una gran victoria socialista porque se movilizó y fue a votar muchísima gente. Mucha gente entendió entonces que el proyecto que podía parar a la derecha y a la extrema derecha era el del Partido Socialista. Lo que deseo es que ahora pase exactamente lo mismo.
¿Cuáles han sido las iniciativas más relevantes aprobadas por el Govern que ha presidido?
Yo destacaría varias, entre ellas la paz social en las escuelas, la aprobación de la renta social garantizada o el desarrollo de todo lo que son los derechos sanitarios y vinculados a la dependencia, que son iniciativas que afectan directamente a las personas. Asimismo, destacaría también de una forma muy especial la ley de lucha contra el cambio climático.
El 28 de abril tuvimos una gran victoria socialista porque se movilizó y fue a votar muchísima gente
¿Y qué iniciativas previstas hace cuatro años no se han podido acabar de concretar en esta legislatura?
Desde la humildad, pero también desde la sinceridad, creo que en esta legislatura hemos cumplido mucho con la palabra que dimos en su momento. Me gustaría que se examinase el proyecto que defendió el Partido Socialista en las elecciones de 2015, que se mirasen después los “Acords pel canvi” que se firmaron y que se comprobase lo que se ha ejecutado. Se vería que se ha cumplido un tanto por ciento elevadísimo de aquello a lo que nos comprometimos. Dicho esto, es verdad que hay cuestiones en las que me hubiera gustado ir mucho más rápido, por ejemplo en la posibilidad de implementar mucho más la Administración electrónica, para eliminar burocracia y dar un mejor servicio a la ciudadanía. También me hubiera gustado hacer más en políticas de movilidad o de vivienda. Pero creo que vamos en la línea correcta.
La situación de inestabilidad política en el Gobierno central, ¿ha influido en Baleares?
Sí, sin duda. Ha sido una cuestión clave en esta legislatura. Durante tres años y medio tuvimos una parálisis absoluta de los dos gobiernos de Mariano Rajoy, que coincidieron con mi mandato como presidenta del Govern. Con posterioridad, el Gobierno de Pedro Sánchez apenas duró diez meses. Por ello, cuestiones que para nosotros son fundamentales, como por ejemplo el sistema de financiación, no se han podido abordar de forma seria a causa de esa situación que hemos vivido. En ese sentido, creo que es muy positivo que el PSOE haya ganado las recientes elecciones generales y que podamos tener un gobierno estable que dure cuatro años. Eso hará que podamos sacar adelante proyectos que son de Estado y que son muy importantes para estas islas.
Me hubiera gustado hacer más en políticas de movilidad o de vivienda; pero creo que vamos en la línea correcta
¿Cuáles son las propuestas del PSOE para estas próximas elecciones?
Soy la candidata de un partido que tiene 140 años de historia. En ese sentido, no nos tenemos que reinventar ni explicar demasiado. Somos el único partido de España que puede decir quiénes somos. Es evidente que nacimos para defender la igualdad, la democracia, la libertad y la justicia social. Por tanto, nuestra línea de trabajo siempre ha sido la misma cuando hemos gobernado y seguirá siendo ésa.
¿Me podría concretar, si fuera posible por favor en sólo dos o tres minutos, cuál es esa línea de trabajo?
En dos minutos. Lo primero que quiero hacer en la próxima legislatura es ampliar derechos a los ciudadanos y ciudadanas, que haya más derechos en vivienda, para la gente joven, para las mujeres y para las familias, por ejemplo con la educación gratuita y universal de cero a tres años. En segundo lugar, queremos seguir con el crecimiento de la riqueza, pero redistribuyéndola y diversificando la economía. Así, seguiremos apostando por el turismo, pero también por la economía del conocimiento, la pequeña y mediana empresa, la industria y las energías limpias, ya que todo ello da un valor añadido a nivel económico a esta comunidad.
Aún le quedan unos segundos…
Entonces, sigo —sonríe—. Desde el PSOE también queremos continuar con las medidas en favor del paisaje, el territorio, el medio ambiente y la sostenibilidad. En ese sentido, queremos desarrollar de una manera seria y valiente leyes que se han aprobado en esta pasada legislatura, como la ley de cambio climático, la ley de residuos o la ley de limitación de vehículos en Formentera. Los únicos que pueden garantizar que se desarrollarán dichas leyes somos nosotros, los que hemos creído en ellas. En definitiva, lo que pretendemos es seguir haciendo política, poniendo en el centro de la política a las personas.
Creo mucho en el diálogo como forma de hacer política, en especial en estos momentos tan convulsos que estamos viviendo
¿Cómo ha sido la relación entre los partidos que firmaron los “Acords pel canvi”?
Yo diría que el “Pacte” ha funcionado bien y que hemos cumplido con la palabra dada. Y eso es lo importante. Hemos sido capaces de poner los intereses de esta comunidad y de los ciudadanos por encima de los intereses de partido. Es algo que quiero agradecer a todos los partidos que lo han hecho posible. Es verdad que ha habido algunos momentos de dificultades, pero los hemos superado siempre desde el diálogo. Yo creo mucho en el diálogo como forma de hacer política, en especial en estos momentos tan convulsos que estamos viviendo, en donde hay muchísimo populismo, mucha demagogia y una extrema derecha durísima que avanza por todo el mundo. Ante todo ello, el diálogo, el consenso, el respeto o la tolerancia deben ser valores fundamentales en política. De hecho, a lo largo de la pasada legislatura llegamos a acuerdos no sólo con los partidos políticos, los sindicatos o las patronales, sino también con la ciudadanía organizada, con la sociedad civil. Creo que esa es la forma de hacer política en el siglo XXI.
Sin embargo, en los dos últimos años han nacido varias entidades cívicas muy críticas con el Govern, al que acusan por ejemplo de catalanista…
He visto que desde fuera del Govern hay mucha gente obsesionada con Cataluña. Y yo siempre he dicho que mi obsesión son las Islas Baleares, Mallorca, Menorca, Ibiza y Formentera. Durante muchos años, me he dedicado a la acción pública para mejorar la realidad de la sociedad en la que vivo y a la que me debo. Amo estas islas. Tengo una pasión especial por sus gentes. Creo que somos una comunidad con una gran potencialidad, en la que hay gente magnífica, solidaria, capaz de luchar por un futuro mejor. Pienso ahora, por ejemplo, en toda la gente joven que ofreció su ayuda de forma desinteresada tras las trágicas inundaciones de octubre del pasado año en la zona de Llevant. Esos jóvenes nos demostraron lo fuertes que podemos ser si estamos juntos.
Volviendo de nuevo a sus socios, ¿esta vez Podemos sí podría entrar a formar parte de su Govern?
Mire, quiero ser muy clara. Me presento para ganar las elecciones. Nosotros, como Partido Socialista, salimos a ganar las elecciones y nuestro compromiso es aplicar nuestro programa si tenemos la confianza de los ciudadanos este 26 de mayo. Tenemos un proyecto serio, riguroso y equilibrado. Un proyecto de defensa de los intereses de Baleares dentro de España y de Europa, de ampliación de derechos, de mejora de nuestra economía. Yo espero tener la confianza de la ciudadanía para poderlo aplicar. Si no es así y tenemos que hablar con otras formaciones para poder conformar el Govern, todo el mundo sabe de nuestra capacidad de diálogo. En ese sentido, creo que como presidenta he demostrado ya que hemos sabido llegar a acuerdos que han hecho avanzar a estas islas, algo que en muy pocas ocasiones había pasado con anterioridad.
Si tenemos que hablar con otras formaciones para poder conformar el Govern, todo el mundo sabe de nuestra capacidad de diálogo
En esta legislatura ha podido llegar también a acuerdos puntuales con el PP, Cs o el PI…
La política es el arte de intentar llegar a consensos desde posiciones ideológicas diferentes. Si todas las fuerzas políticas actuamos de ese modo, siempre habrá muchos más acuerdos que si no lo hacemos así. Hay cuestiones que son de Estado para esta comunidad, como por ejemplo el Régimen Especial de Baleares o el sistema de financiación autonómico. En ese contexto, hemos de recordar que el Congreso convalidó recientemente el decreto ley del Régimen Especial de Baleares, con el voto a favor de casi todas las fuerzas políticas, incluido el Partido Popular, y la abstención de Ciudadanos y de Coalición Canaria. Eso quiere decir que hemos sido capaces de ponernos de acuerdo en cuestiones que son necesarias para estas islas, que afectan a las inversiones que necesitamos para superar las desventajas que crea la insularidad. A partir de ahí tendremos que seguir trabajando juntos.
En materia lingüística, en cambio, no ha sido posible ese consenso, al entender el PP y Cs que se ha estado discriminando el castellano…
Mire, en Baleares tenemos dos lenguas cooficiales, que nos enriquecen. Las dos tienen que protegerse por parte de la Administración pública, que es lo que hemos hecho. Nunca hemos tenido ningún problema en ese sentido. Las lenguas siempre han sido para mí elementos de entendimiento y patrimonio de un pueblo. Por eso, no encuentro ninguna explicación lógica a las acusaciones que ha recibido el Govern en el sentido que me comenta. Además, le añadiría que una de las cosas buenas que tenemos en Baleares es que somos una sociedad muy plural, muy diversa, muy abierta, con una gran capacidad para acoger a gente de todo el mundo.
¿Qué les diría entonces a quienes han recibido el mensaje de que Baleares no quiere médicos u otros profesionales si no saben catalán?
En primer lugar, les diría que quien ha transmitido ese mensaje ha mentido. Creo que es importante decirlo con todas las letras. En segundo lugar, les diría que quien despidió a médicos y profesionales sanitarios de nuestros hospitales y centros de salud fue el Govern del PP en la pasada legislatura. Nosotros hemos hecho todo lo contrario. Hemos contratado a más de 1.200 profesionales sanitarios en esta legislatura y hemos convocado las oposiciones más grandes de la historia en sanidad, con un total de 5.000 plazas ofertadas. Creo que esto es importante reiterarlo una vez más y también que para presentarse a estas oposiciones no es preciso tener previamente un título de catalán. Además, cuando ganas la plaza, no te la quita nadie. Si con posterioridad aprendes luego catalán, puedes hacer promoción interna dentro de la carrera profesional.
Nunca se ha dejado de atender a una persona en esta tierra por una cuestión lingüística
En cualquier caso, es cierto que ha sido una cuestión muy controvertida en esta pasada legislatura…
Insisto en que nuestro planteamiento es que cualquier persona, sepa o no catalán, se pueda presentar a las pruebas para entrar en el Servicio de Salud. De hecho, se están presentando muchas personas de fuera de Baleares. Esa es la realidad. Por otra parte, también le quiero decir que nunca se ha dejado de atender a una persona en esta tierra por una cuestión lingüística. Nunca. Nuestro Govern ha priorizado la asistencia sanitaria y tener los mejores profesionales, mejorando sus condiciones económicas y laborales. Hemos atendido mejor, con más servicios que nunca, a los ciudadanos de estas islas. Aun así, sabemos que aún queda mucho camino por recorrer, porque hay muchas listas de espera. La situación es complicada porque veníamos de cuatro años de recortes en el sistema sanitario, que fueron brutales, con el despido de muchísimos profesionales.
Usted es farmacéutica de profesión. ¿Es una vocación que de algún modo le ha ayudado luego a la hora de ejercer su labor política?
Sin duda me ha servido, sí, porque en la farmacia has de estar de cara al público y por tanto tener la capacidad de hablar con mucha gente. Como sabe, vengo de una familia de farmacéuticos, mi abuelo lo era ya y la farmacia de mi padre tiene cien años de historia. En relación a lo que me ha preguntado, le diría que una farmacia es también un lugar en el que te cuentan muchas intimidades —sonríe—. Suele haber además muchas tertulias políticas allí, sobre todo en la trastienda, que también sirven de mucho —sonríe de nuevo—. De mi profesión me gusta igualmente todo lo que va ligado a la parte sanitaria, al derecho de las personas a la salud, es algo que tengo muy incorporado también.