El piano de Kiev Portella y el violín de Eduard Marcet se unieron este lunes para el último concierto del Festival de Música que organiza Joventuts Musicals de Maó en el Claustre de Sant Francesc. Fue un espectáculo marcado por el gran interés del público. La afluencia masiva obligó a la organización a instalar a toda prisa más sillas en el patio del Museu de Menorca para poder dar cabida a toda la gente que no quiso perderse la audición. Fue un dúo tan inédito como conjuntado que ofreció un concierto con piezas de Kreisler, Grieg, la Sonatina Op. 100 de Dvorak, Chopin, Massenet y Monti. La decisión de unir ambos talentos fue del presidente de JJMM, Lluís Sintes quien creyó que, en este caso, la suma de arte de ambos intérpretes podía dar mucho más de si y el público así lo reconoció al final del concierto. Sintes también aprovechó la ocasión para dar a conocer la creación de un carnet de socio infantil gratuito para todos los jóvenes que quieran pertenecer a Joventuts Musicals. En esta velada el propio Sintes entregó el primero. |